Divagaciones de una Poulain
by Nea Poulain

domingo, 1 de septiembre de 2013

Premios con preguntas

Itzabella Ortaceli, de Detrás de la tecla le dio un premio a mi blog y no pensaba seguir la cadena, pero estoy escasa de entradas y pues me dije uno me hará mal. Por otro lado, no lo pasaré a nadie porque a los que se los podría haber pasado, pues ya lo tienen o no les gusta poner entradas de premios

«One lovely blog award»


Las reglas son agredecerlo a quien te lo pasó (¡muchísimas gracias, Itza!), volverte seguidor del blog que te lo pasó (¡eso ya lo soy!) contestar once preguntas y pasarlo… pero de pasarlo creo que no, así que sólo contestaré las preguntas

¿Libro favorito?          
No tengo uno en especial, hay muchísimas libros que me han marcado. Si tuviera que hablar de uno en especial, diría que leo La edad de la punzada hasta que me convenzo de que mis problemas no son tan grandes, que leo Marina preguntándome cuales son los secretos enterrados en el ático de mi alma y que leo Diablo Guardián pensando que Violetta es la mujer en la que nunca quiero convertirme.  

¿Qué tipo de música te gusta?
Depende del día o del humor que tenga. Prefiero la llamada música indie, tranquila, la mayoría de las veces. Por supuesto, en cuestión de pop, La oreja de Van Gogh siempre será mi favorito y por supuesto, el J-rock es una de mis pasiones.

¿Libros que te han marcado o te han hecho ver la vida desde otra perspectiva?
La edad de la punzada me hizo valorar un poco más mi adolescencia, me hizo pensar en muchas cosas sobre mi vida personal y en la manera en la que gasta mi tiempo. Por otro lado, Sibila, de María García Esperón es una concepción del tiempo y de la historia que me hizo reflexionar mucho, leer el libro una y otra vez. Son los que más me han marcado. Algunos otros también me han hecho ver las cosas de manera diferente, o me han dejado huella, pero realmente, ninguno como estos dos.

¿Aproximadamente cuántos libros lees al mes?
No llevo la cuenta. Tres, cuatro, cinco si estoy de racha. A veces más.

¿Ebook o libro impreso?
Los dos.

¿Qué prefieres? Brujo/a, hada o vampiro.
Bruja.

¿Anime o manga favorito?
Code Geass. Porque C.C. es mi personaje favorito, por el dualismo Lelouch/Zero, porque Shirley demuestra ser capaz de dejar atrás sus convicciones por la persona que ama, por los que luchan por los ideales perdidos y aquellos que destruyen el mundo destruyéndose a sí mismos, para volverlo a construir.

¿Prefieres leer o escribir?
Las dos cosas.

¿Película favorita?
Amelie. Porque me hace volver a creer en el romanticismo y en el «a ver qué pasa», porque me recuerda que «Sin ti, las emociones de hoy, sólo serían la piel muerta de ayer» y porque me recuerda que siempre buscamos a alguien cuyas excentricidades se entiendan con las nuestras.

Algo que no puede faltar mientras lees.
Un lápiz. Me encanta subrayar libros.

Algo que no soportas oír acerca de quienes amamos la literatura juvenil.

En general, no me gusta que se desestime a la literatura juvenil, pero tampoco que se sobrevalore. Creo que leer literatura juvenil es tan válido como leer a Kant y aquellos que opinen lo contrario, que nos dejen en paz a los demás. 

sábado, 31 de agosto de 2013

Now you see me...


Los ilusionistas. Admito que la fui a ver porque era eso o ver The Bling Ring y aunque ver a Emma Watson me seducía, mi madre eligió está porque la veía con más acción. No la culpo. Pronto dejará de estar en cartelera y yo no tengo ni idea de si me gustó o no. Así que volviendo el tiempo atrás voy a hacer un recuento de las cosas que me gustaron y las que no, para ponerlo todo en balance.

Lo que me gustó:

  1. Daniel Atlas. Más que por ser Daniel Atlas, por sus trucos de cartas al principio. He de decir que fue el que más se me quedo grabado en la mente, porque no me acuerdo del nombre de la chica pelirroja, y apenas me acuerdo de los otros dos.
  2. Los efectos especiales. Algunos.
  3. La persecución con los carros. Siempre me gustan las persecuciones, más si acaban con carros volteados. Pero no es que esta haya sido una persecución muy impresionante, hasta la de The Italian Job le gana.

Lo que no me gustó:

  1. Morgan Freeman dando vueltas. Morgan Freeman… bueno, siempre actua de Morgan Freeman y generalmente hace películas extraordinarias, sobre todo como Antes de partir. Aquí está el hecho de que toda la película esperé que hiciera algo y nada, simplemente una gran nada. ¿Su personaje desenmascara magos? Pues bien, los de la película le llevan ventaja siempre.
  2.  La francesa. ¿Qué hace allí?
  3. El final en general. Todo lo relacionado a El ojo. El final sorprende al espectador, sí, pero resulta forzando, increíble, una declaración completa del hecho de que los personajes no están construidos y que cambian abruptamente de personalidad. Toma las salidas fáciles, finalmente.


En general, la historia tenía una premisa arrolladora, interesante y un comienzo muy bueno. Después desinfla. No tengo nada más que decir. No sé qué más decir. Sinceramente, esperaba algo más que efectos y movimientos de cámara: esperaba una historia que me mantuviera pegada a la pantalla.

viernes, 5 de julio de 2013

Todos mis sueños, tuyos

Este libro lo conseguí gracias a eBook Tours (que lamentablemente se está tomando un descanso temporal, pero no duden en inscribirse cuando vuelvan) y vaya que me ha encantado. Sobre todo porque deseaba hincarle el diente desde que se anunció su salida.

Sinopsis: Hace más de seis meses que Alexis no ve a sus padres. Cansado de ocultar su homosexualidad y soportar las humillaciones de su madre, dejó su casa arrastrando la depresión acumulada durante más de veinte años. Ahora vive en el centro de Buenos Aires, a veinte minutos de la Facultad de Filosofía y Letras, con Martín, un joven bohemio estudiante de Historia, y Franco, encargado de una librería y amante de la literatura medieval. En el bar de la facultad, Alexis conoce a Daniel, un estudiante de intercambio recién llegado de Estados Unidos, con quien inicia una relación.

Alexis vive en Buenos Aires y estudia Letras en la UBA; proviene de una familia desestructurada: un padre borracho, una madre loca. Alexis se marcha de su casa, harto, y acaba viviendo con Martín, estudiante de Historia, y Franco, de Letras, también gay, por el que es bastante notorio que se siente atraído. La novela se mueve en círculo: empieza y termina con la muerte de su padre, y se mueve a lo largo de esa circunferencia, con la voz de Alexis, que no duda en narrarnos los detalles de su día a día, junto a sus dudas y miedos, que lo embargan al principio de la novela.

Alexis
La voz de Alexis es única y creo que es mi parte favorita de la novela: la narración. Esa narración que vuelve a «Ale» real y te deja con ganas de abrazarlo repetidas veces mientras él se esfuerza por superar sus miedos y conoce a Daniel, ese sol de hombre por el que nadie puede evitar tomar parte, aunque sea un poquito, e inicia una relación con él, aun cuando sus preferencias están bastante claras desde el principio.

Sin embargo, la novela va más allá de las relaciones de Alexis. Es la historia de Ale, son sus miedos, sus amistades, sus dificultades, sus anhelos y sus sueños. Es la historia de un chico que nunca ha estado con un chico y que anhela a un novio, que ama la lingüística y no le importa la barriga de Franco, cuyos ligues de internet disminuyen cada vez más, debido a su tendencia a engordar. Es la historia del chico que trabaja en el bar de la facultad, del chico que habla de la sociedad mientras viaja en el colectivo.


El libro es la voz de Alexis y la voz de Alexis es sin duda, maravillosa.