Divagaciones de una Poulain
by Nea Poulain

domingo, 5 de febrero de 2012

El alquimista


La verdad es que yo nunca hubiera comprado este libro (junto con su secuela, el Mago) si mi primer ejemplar de Memorias de Idhún no hubiera venido dañado de las páginas del final. Así que cuando fui a regresarlo me dijeron que no tenían Memorias de Idhún: La resistencia y escogí estos dos porque MdI era tan caro que con el precio de los dos se cubría el total del libro que estaba regresando. Así conocí al Alquimista.

Sinopsis: Cuando Sophie y Josh Newman, dos adolescentes que viven en San Francisco, deciden ponerse a trabajar en verano para sacarse un poco de dinero, no se imaginan que los afables propietarios de la librería donde Josh trabaja, Nick y Perry Fleming, son en realidad los últimos guardianes de un libro mágico y milenario, responsable del equilibrio entre el Bien y el Mal...

El libro es fantástico de pies a cabeza, con acción casi desde la primera página y múltiples referencias a mitos y leyendas de todo el mundo. La primera y la más notoria es la del matrimonio Flamel, Nicolas y Perenelle, que vivieron en Francia hace mucho tiempo y fueron reales. Casualmente Josh trabaja en la librería que al año 2007 a algo así ellos dos mantienen en San Fransisco. Allí comienza la acción: cuando John Dee (otro personaje célebre… que vivía en la Inglaterra Isabelina. El que firmaba con OO7) intenta robar el Códex, el libro donde está la fórmula del elíxir de la inmortalidad que permite que Perenelle y Nicolas vivan para siempre, y lo logra, excepto por las dos últimas páginas, que Josh rescata.

Y a partir de allí nos queda claro que Josh y Sophie no son sólo chicos normales y corrientes, que están trabajando por el verano. Hay algo más. Y después resulta que son los mellizos de una profecía que estaba, por supuesto, en el libro robado. Sus aureas son otro y plata, puros. Así que nos vamos adentrando en un mundo completamente nuevo en el que los peligros acechan a la vuelta de la esquina mientras el autor nos presenta a personajes mitológicos como Scathach, la Sombra, una antigua Diosa Celta (aunque es diferente en la mitología que en el libro) que ayuda a Nicolas, o a Hécate, una antigua Diosa Triada, e incluso a Morrigan, otra diosa Celta.

La continuación del libro es El Mago, y el final es muy abierto en este así que van a querer ir corriendo por el que sigue en cuanto acaben este: es realmente muy muy bueno.

Nea

jueves, 2 de febrero de 2012

Hablemos de Poesía (II): Poema 20


Esta vez, en la segunda entrega de Hablemos de Poesía, les traigo otro poema, también muy famoso, que también entra entre mis favoritos, por supuesto. El poema en cuestión también me lo sé de memoria (y también lo declame frente a los idiotas de mi secundaria que no sabían apreciar poesía).

Poema 20 – Pablo Neruda

PUEDO escribir los versos más tristes esta noche.

Escribir, por ejemplo: " La noche está estrellada,
y tiritan, azules, los astros, a lo lejos".

El viento de la noche gira en el cielo y canta.

Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Yo la quise, y a veces ella también me quiso.

En las noches como ésta la tuve entre mis brazos.
La besé tantas veces bajo el cielo infinito.

Ella me quiso, a veces yo también la quería.
Cómo no haber amado sus grandes ojos fijos.

Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Pensar que no la tengo. Sentir que la he perdido.

Oír la noche inmensa, más inmensa sin ella.
Y el verso cae al alma como pasto el rocío.

Qué importa que mi amor no pudiera guardarla.
La noche está estrellada y ella no está conmigo.

Eso es todo. A lo lejos alguien canta. A lo lejos.
Mi alma no se contenta con haberla perdido.

Como para acercarla mi mirada la busca.
Mi corazón la busca, y ella no está conmigo.

La misma noche que hace blanquear los mismos árboles.
Nosotros, los de entonces, ya no somos los mismos.

Ya no la quiero, es cierto, pero cuánto la quise.
Mi voz buscaba el viento para tocar su oído.

De otro. Será de otro. Como antes de mis besos.
Su voz, su cuerpo claro. Sus ojos infinitos.

Ya no la quiero, es cierto, pero tal vez la quiero.
Es tan corto el amor, y es tan largo el olvido.

Porque en noches como ésta la tuve entre mis brazos,
mi alma no se contenta con haberla perdido.

Aunque éste sea el último dolor que ella me causa,
y éstos sean los últimos versos que yo le escribo.

Pablo Neruda

Nea

martes, 31 de enero de 2012

Cazadores de sombras: Ciudad de Ceniza


Sinopsis: Clary Fray desearía que su vida volviera a la normalidad. Si pudiera dejar atrás el mundo de los cazadores de sombras, tendría más tiempo para Simon, su mejor amigo, que se está convirtiendo en algo más... Pero el mundo subterráneo que acaba de descubrir no está preparado para dejarla ir; en especial ese apuesto y exasperante Jace. Para complicar las cosas, una ola de asesinatos sacude la ciudad. Clary cree que Valentine está detrás de esas muertes, pero ¿cómo podrá detenerle si Jace parece dispuesto a traicionar todo en lo que cree para ayudar a su padre?

¿Qué les puedo contar de este libro? Bueno, voy a intentar reseñarlo sin spoilers, cosa poco propia de mí, pero bueno, allá vamos.

Es muy muy muy bueno, aquí ya sabemos de qué va la historia, sin embargo, hay tanto misterio como al principio. Tenemos a un Jace bastante más interesante que al principio. Sigue habiendo diálogos ingeniosos entre Clary y Jace, ahora acompañados de una perpetua tensión amorosa. Y bastante morbo por lo del incesto.

Y dejando de lado a los problemas amorosos de los protagonistas, tenemos a una Inquisidora neurótica que está amargada por alguna inexplicable razón y está empeñada en que Jace es culpable de algo. (Y Jace comportándose como un idiota no hace más que hacer que la Inquisidora siga acusándolo de más y más cosas).

Las cosas dejan de girar entorno a Clary únicamente, y ahora vemos a todos los personajes actuando por su cuenta con sus respectivas historias y problemas, sin embargo, todo es una misma trama.

El libro deja bastantes cuestiones sin resolver… y si quieren resolverlas, ya pueden ir tomando Ciudad de Cristal y leyéndolo.

Nea