Divagaciones de una Poulain
by Nea Poulain

martes, 30 de abril de 2019

All-New Wolverine, Tom Taylor | Reseña


Sinopsis: X-23 was created to be a weapon; for a time, that's all she was. But with the help of her mentor, Logan -- the original Wolverine -- she escaped that dark past. Now, the man she knew has fallen, but Laura will honor his memory as the All-New Wolverine. But with the famous cowl comes a world of misery and mystery -- like the devastating secret of the Sisters. Uncovering it will involve new friends Doctor Strange and the Wasp, and lethal new enemies like the Taskmaster! But after recent events, Laura is growing used to doing everything in her power to save those around her from forces hell-bent on destruction. If anyone can stop them, it's Laura. After all, it's what Wolverine does. 

Una cosa que tienen que saber: X-23, Laura Kinney, es uno de mis personajes favoritos de Marvel. Otra cosa que tienen que saber: me plantee hacer esta reseña volumen por volumen, de lo tanto que me gustó (tengo pendiente hablarles de la de Marjorie M. Liu porque las ilustraciones de Sana Takeda son mis favoritas), pero estaba seguro de que me iban a matar por ser tan monotemática, así que mejor deseché la idea y lo junté todo en una sola reseña. Vamos, que debía encontrar en mi la suficiente capacidad de síntesis como para que esto no fuera del tamaño de tres entradas enormes. Así que... ¿por dónde empezar?

¿De niños les gustaban los superhéroes? La pregunta no tiene nada que ver con que hoy sea el día del niño (que lo es, ¡felicidades!), sino que es algo con lo que quiero empezar por varias razones. A mí no. O más bien, no sabía si me gustaban porque nunca jamás me acerqué a ellos. No lo hice porque fueran cosas de chicos, diosito sabía que yo no era la más indicada para seguir esos estereotipos: tenía una espada color amarillo, carritos y un carro a control remoto que nunca aprendí a manejar muy bien. Simplemente, los superhéroes me pasaban por encima porque ninguno de los más conocidos me interesaba demasiado (ni siquiera la mujer maravilla) y no tenía más. No conocía más cosas. El mundito empezó a interesarme cuando Ms Marvel llegó a mi vida y el resto es historia. Después de Ms Marvel, la siguiente que cayó, fue Laura Kinney.

Esta fue la primer serie que leí de ella porque fue la primera que conseguí (antes de las dos anteriores cronológicamente, de Craig Thomas y Marjorie M Liu) y quedé enamorada. No conocía más del pasado de Laura más que lo que había visto en su entrada en la wikia de Marvel y los flashbacks que salían pero no me importó en lo más mínimo. Yo salí de esta serie enamorada. La acabo de terminar después de bastante tiempo porque por alguna razón la dejé en hiatus y creo que es una de las series más consistentes de Marvel en los últimos años. Que no son muchas, vamos, parece que están en esa época de lanzar chicles contra el techo esperando que uno pegue y casi ninguno lo hace. Incluso una de mis favoritas, Spider-Gwen, tiene un par de volúmenes que detesto con toda mi alma. En fin, vamos a hablar de esta serie por puntos para intentar tocar todos los temas que quiero. 

1. El tema de cada volumen está bien definido y la trama también. Dejando de lado algunos issues que tienen algunas grapas que son stand-alone al principio y al final, todos los volúmenes tienen una introducción, un desarrollo y un final del conflicto que deja las suficientes interrogantes abiertas para seguir la trama de Laura Kinney. Incluso el más caótico de ellos, que es el de Civil War II (que no fue exactamente el mejor evento de la historia y que se trató de ver como Marvel lograba que a mí me cayera mal Carol Danvers y que estuviera de acuerdo en algo con Tony Stark... ugh). Las tramas de los volúmenes casi siempre tienen que ver con el pasado de Laura persiguiéndola mientras se acostumbra a ser Wolverine y lidia con más clones de ella misma. De mis favoritas es el primer volúmen, The Four Sisters y Enemy of the State

2. ¡Gabby! Es un personaje que me fascinó y que es la parte más light de la vida de Laura Kinney, que siempre se ha caracterizado por ser oscura y bastante dramática. Es otro clon de X-23, el más joven de todos. Lucha por ser una buena persona aunque no tiene una brújula moral muy definida, al menos a principio de la serie, y no siente dolor lo que definitivamente la hace un personaje interesante. Me encanta su buen humor y cómo se va desarrollando poco a poco a lo largo de los seis volúmenes. 

3. El desarrollo de Laura como personaje. Creo que Tom Taylor sabía que clase de historia quería darle a X-23, que clase de convicciones, problemas y de retos. Exceptuando por el último volumen, que se desarrolla en el futuro *no tan lejano* y es Old Woman Laura (que, no se engañen, no se parece a Old Man Logan), volumen a volumen se puede ir viendo cómo Laura va cambiando y va creciendo. Los personajes que siempre se quedan igual no son tan dinámicos y en general no me atraen tanto como aquellos que cambian, que se enfrentan a los conflictos y no salen los mismos. Siempre es interesante analizar como los personajes cambian y me encanta el rumbo que esta serie le dio a Laura Kinney (ya veremos en la nueva X-23, que salió el año pasado y ni siquiera he leído).

4. El arte suele ser bueno. Por esta serie pasaron un montón de ilustradores y no los recuerdo a todos. Pero casi siempre destacó el trabajo de David Lopez, Ig Guara, Ramon Rosanas, Juan Cabal y otro montón de nombres que no recuerdo (que no haya consistencia entre los artistas luego me saca de pedo, pero creo que casi todos los que participaron en All-New Wolverine hicieron un trabajo chido, ahorita no puedo acordarme de una issue que de verdad odiara por el arte). 

Bueno, creo que esos son todos los puntos. Les recomiendo la serie. Yo la leí cuando no sabía mucho de Marvel y les puedo decir que no salí demasiado confundida..., pero sí tuve que usar la wikia. Sobre todo porque a media serie te atacan con un evento, muchas cosas son del pasado de Laura (aunque la verdad leer todas las series dedicadas a X-23 es algo increíble, todavía no me decepcionan realmente), pero igual si por ahí les interesa el personaje, creo que no es tan mal lugar para empezar (aunque el mejor orden para empezar con ella sí es cronológicamente, debo decir).

domingo, 28 de abril de 2019

Mexicoland, Jaime Alfonso Sandoval | Reseña

Sinopsis: Mexicoland es perfecto, lo mejor de México en un solo lugar: historia, música y comida. Lo malo es que todo es falso. Es un parque de diversiones en el futuro, el resto del país ha colapsado por la violencia y la anarquía. Apenas sobrevive un pequeño territorio donde se funda México Nuevo, una sociedad en la que cualquier delito es castigado con extrema crueldad. Ahí, Cuauhtémoc Rojo, en un solo día, se queda sin padres, escuela y casa. Pronto descubrirá que si quiere sobrevivir, necesita encontrar respuestas: ¿quiénes son esos extraños ancianos que lo vigilan? ¿Qué sucedió en realidad en el accidente de sus padres? ¿Qué se oculta detrás de los enormes muros que rodean las ciudades? Una distopía mexicana, con el humor y la acidez de Jaime Alfonso Sandoval.

Se unieron los astros, se alinearon los planetas, ocurrió un milagro, me salió mi número de la suerte, no sé que pasó, pero fui a la Biblioteca Vasconselos y no encontré uno, sino los dos ejemplares de Mexicoland de Jaime Alfonso Sandoval. Obviamente salí con uno de allí. Los ejemplares se la pasaban en préstamo todo el tiempo, así que sí considero un milagro que haya conseguido uno de ellos. Lo leí en tiempo récord (perdón, soy esa clase de lectora, no conozco otra manera de leer) y ya estoy haciendo la reseña para recomendárselos. Quiero adelantar que me gustó, pero vamos por partes, ¿no? Como Jack, el destripador.


1. Lo distópico fuera del primer mundo


Las categorías *primer mundo* y *tercer mundo* igual y no son las más adecuadas, pero creo que es la mejor manera que tengo que hablar de este asunto. Estados Unidos (y otros pocos países Europeos) han dominado la ciencia ficción y lo distópico en los últimos años. No es un género nuevo, pero existió un boom después de que Los juegos del hambre llegaron al mercado editorial y se convirtieron en un fenómeno (aunque antes de eso, ya existían muchísimos libros del género, desde la saga de Máquinas Mortales, del inglés Philip Reeve, hasta Battle Royale). Durante un tiempo, todo lo que vi publicado del género salía de editoriales norteamericanas e inglesas. ¿Cuándo iba a ser nuestro turno de imaginarnos otras realidades distópicas alejadas de lo que se proponía en esos fenómenos de ventas? Creo que ese momento está llegando, porque la ciencia ficción siempre se ha escrito en todo el mundo, pero ahora hay más lugar para quien busca explorar el futuro y la ciencia ficción desde otro lugar. Por ejemplo, ya les hablé de Quien teme a la muerte de Nnedi Okorafor en una reseña pasada, que es ciencia ficción ambientada en un Sudán futurista.

En este momento nos estamos enfrentando a Mexicoland. Distopía mexicana, con México partido en dos. De un lado está lo que la gente llama los territorios perdidos y del otro está un país donde todo cuesta dinero (hasta usar el elevador o entrar al parque), la gente vive en la pobreza y todo está controlado. Pagar un permiso para tener libros es algo demasiado costoso, no hay casi pensiones o retiros y la gente vive ahogada en deudas. Me pareció, sobre todo al principio, cuando el protagonista, Cuauhtémoc Rojo, se ve envuelto en un desmadre burocrático (en lo que se convierte su vida), algo que se asmejaba a la pesadilla que era El Proceso, de Kafka. Un escenario casi Kafkiano. La construcción de este México Nuevo de Jaime Alfonso Sandoval me pareció uno de los mayores aciertos del libro.


México Nuevo en realidad no es muy nuevo. México Nuevo es el México que conocemos llevado al extremo del capitalismo. Todo cuesta, la gente vive enajenada trabajando intentando tener una vida mejor y se convencen de que esa es la única manera de vivir. Hay quien vive en enormes barrios horizontales, que se alzan hasta tener casi cien pisos y nunca sale de allí en toda su vida: allí hay parques, escuelas, enormes tiendas departamentales para que gasten la miseria que ganan en sus trabajos. Un mundo terrorífico en todo sentido más inspirado en la realidad de lo que nos gustaría, pero que finalmente es una historia que estamos creando en nuestro entorno. Estamos hablando de nosotros, estamos leyendo de nosotros.


Nota aparte, el worldbuilding de este libro me pareció un perfecto atisbo al despeñadero que nos está llevando el capitalismo. Sobre todo por la situación de los trabajadores: los ricos se hacen más ricos mientras pagan miserias y se roban el producto de la fuerza de trabajo de otros. Y como soy yo obviamente analizo esas cosas. Jaime Alfonso Sandoval nos presenta dos mundos abismales: en el que vive Temo, sin tecnología, con trabajos precarios, sin posibilidades de pensión, donde la gente se vuelve loca ahorrando para poder tener un retiro y el de la gente que vive en Costamar, los banqueros, los descendientes de los fundadores de México Nuevo, la gente rica, con miles y miles de privilegios. Unos viven sobre el sufrimiento de otros.

Pero bueno, vamos a hablar de los personajes.

2. Los personajes (y su agencia)


¿Qué tanta agencia puede tener alguien cómo Temo, al que sólo arrastran de un lado a otro sin posibilidad de elección sobre su futuro? Al menos durante la primera parte del libro, me gustó la manera en que la trama arrastraba a Temo. Sin agencia alguna, simplemente viendo que otro desastre le caía encima. La historia empieza, para él, justo en el momento en el que cambia todo: lo sacan de clase para decirle que sus papás se tiraron a las vías del metro, cosa que es considerada un delito y que todo su fondo de ahorro se va a ir para pagar las indemnizaciones. Temo no tiene ni que decir en el asunto. Es un protagonista arrastrado por las circunstancias, porque el entorno en el que vive no le da opciones ni elecciones. La única elección es sobrevivir cómo se lo proponen o morir. Y punto.

Temo, básicamente
Me gusta que aun así sea obvio que los personajes vayan desarrollando convicciones (este yo de acuerdo o no con ellas) y actuén conforme a ellas. Me desespera un poco que Temo sea un hijo del sistema tan obvio, que crea que todas las injusticias que ve son *lo normal* y así son las cosas y punto, pero la verdad es que me gusta ir viendo el cambio de su manera de pensar poco a poco, sobre todo al enfrentarse a las situaciones en las que se ve metido. Por otro lado, mi favorito es Franc. Al principio no lo era, pero conforme se van revelando cosas sobre su personaje, se fue convirtiendo en mi favorito. 

De lo demás... bueno, la verdad es que la novela tiene un elenco extendidísimo de personajes secundarios, terciarios y de esos que aparecen sólo una línea. Seguirles el paso es a la vez confuso y divertido. La mayoría de los personajes tiene un propósito y trabajan por conseguirlo, así sea conseguir un lugar de retiro VIP a costa de otros, lograr que un parque de atracciones abra y funcione para los turistas o ser un revolucionario. Me gustó el papel y el reconocimiento que se le da a los ancianos en la historia, que suelen ser grandes inivisibles en la sociedad. Nota aparte, creo que Temo sentía más piedad por los ricos que yo. Yo los dinamitaba a todos, pero quizá he leído demasiado a Marx.


Y bueno, hablando de los personajes, creo que llegó la hora de hablar de...

3. Mexicoland, el parque


Mexicoland es un parque de atracciones turístico dirigido a los extranjeros que está inspirado en la cultura Maya. Tiene atracciones inspiradas en la cultura maya, entre las que están un museo que intenta representar al pueblo maya lo más fiablemente posible (y que es un zoológico humano), juegos de pelota, representaciones de sacrificios y... vamos, es una atracción turística que básicamente se basa en escupirle a la cultura maya e insultarla. La existencia de Mexicoland es un insulto. Es vender la cultura, mientras se sigue tratando como mierda a los mayas y a sus descendientes, el racismo se ve por todos lados y, por supuesto, lo que importa no es la cultura, sino el dinero que va a dejar de ganancia. Todo es mercancía dentro del capital. 


Por más descabellado que parezca, no es algo irreal. M. T. Anderson, por ejemplo, tocó el mismo tema en Paisaje con Mano Invisible, cuando habla de cómo la gente vende pedazos de culturas pegosteados unos con otros (crucifijos con budas y dioses del panteón hindú) porque eso es lo que atrae a los extraterrestres. Habla de cómo dentro de un mundo donde lo que vale es lo que es mercancía se vende la cultura y la identidad. Todo es mercancía. Y en Mexicoland es así. Los juegos de pelota, las representaciones, las grandes atracciones del parque no tienen ningún respeto por la cultura maya ni interés en tenerlo. Lo que quieren es dinero (para los ricos, claro).

Toda esta construcción me pareció muy interesante y, lamentablemente, nada descabellada. Sí, el libro puede recordarme por momentos a un universo kafkiano, pero lo veo todo mucho más pegado a la realidad de lo que parece. Para mí, el gran acierto del libro es ese: la manera en la que construye una distopía que nos parece horrenda que está mucho más anclada en la realidad de lo que nos gustaría. Es el gran acierto del libro, de verdad. Entre líneas se atisba una fuerte crítica social, a veces más obvia y a veces más escondida, pero que nos acompaña a lo largo de todo el libro. 

4. Y, finalmente, el rompecabezas completo


Para concluir ya nada más quiero decir unas pocas cosas. La verdad es que para mí hay cosas que se quedaron muy cerca de un libro perfecto. Hay cosas que yo hubiera mejorado (por ejemplo, de plano habría destruido hilos narrativos si no le ayudaban al núcleo de la historia y a las motivaciones de los personajes o los hubiera desarrollado más de manera que hubieran quedado cerrados por completo y que se viera más claramente cómo aportaban al núcleo de la historia, porque soy una Marie Kondo de la narración), creo que al final hay algunos capítulos que sucumben al caos narrativo y que el cierre pudo haber sido mejor. Sin embargo, Mexicoland no deja de ser un libro bastante bueno (mis estándares son simplemente imposibles) que les recomiendo conocer. Refleja a un México que creo que todos conocemos.

Nota aparte, el Movimiento Libertario avergonzaría a Marx, a Lenin, a Kollontai... son un caos (que narrativamente resulta muy entretenido), pero que no tienen ni idea de cómo enfocar una revolución. Me divirtieron, pero también me dieron ganas de decirles que TENÍAN UNA ORGANIZACIÓN SUMAMENTE DEFICIENTE y aventarles en la cara el otro libro que saqué de la biblioteca al mismo tiempo que Mexicoland: ¿Qué hacer? de Lenin. Pero bueno, narrativamente eran entretenidos y esta sólo es una nota al margen. (Andrea, ¿algún día vas a dejar de sacar el marxismo a relucir? NO, ya acepte que no voy a ser cool nunca).


Bueno, pues, ya saben, libro recomendado. Lo publica Penguin en el sello de Montena. Si viven en la CDMX y tienen credencial de la Biblioteca Vasconselos, ya saben que ahí lo pueden encontrar, aunque hay que perseguirlo porque es préstamo muy frecuente. Si lo leen, no duden en contarme qué les pareció.

viernes, 26 de abril de 2019

The Umbrella Academy Book Tag

Cuando publico muchas reseñas seguidas y no tengo idea de qué otras cosas publicar, a veces busco tags porque una de mis cosas favoritas es recomendar libros, no importa cómo lo haga. Y mientras me recupero del bloqueo lector, acabo con las reseñas pendientes y acabo el CampNaNoWriMo (que sigo haciendo), pues hoy les traigo un tag basado en la última serie que vi: The Umbrella Academy (ya reseñé además el primer volumen del comic del que es adaptación la serie, Apocalypse Suite). Lo traigo porque me gustó mucho la serie y me encontré este tag en un blog en inglés llamado Bookdragonism. Aquí van las consignas.


1. Hello: el mejor primer libro de una serie



Este es difícil porque no leo demasiadas series y porque generalmente mis libros favoritos no son los primeros. A veces es difícil elegir simplemente porque no he leído el resto de los libros y no sé si la serie me gusta. Esta vez voy a elegir Máquinas Mortales de Philip Reeve, que es uno de mis libros de ciencia ficción favoritos en la vida. Antes era desconocido, aunque en su momento lo editó Espasa, quien luego lo descatalogó (y remató dos partes cada una por $40). Si no me equivocó ahora está en manos de Planeta, que no hizo el mejor trabajo del mundo con él y además la película fue un fracaso (es una mala adaptación que le falló a los fans del libro y una película confusa por sí sola). Pero lo vengo a recomendar porque quiero que le den una oportunidad a Hester Shaw y a Tom Natsworthy. Eso sí, en inglés, si es posible. Máquinas mortales es un libro entretenido, con personajes creados perfectamente y una historia muy interesante, especialmente para los fans del steampunk.

2.  The Hargreeves Children: Un libro sobre una gran familia distuncional



¡Tengo tantos! Pero bueno, además de los obvios (Cien años de soledad y La casa de los espíritus, ambos recomendados por mí) hoy quiero aprovechar para mencionar El dios de las pequeñas cosas de Arundhati Roy, que es un libro sobre una familia india originaria de Kerala que es todo... menos común. Todos los personajes tienen una historia que se va contando hasta llegar al mismo punto: la muerte de Sophie Mol, una niña. Es un libro que a su vez es un rompecabezas y que a mí me gustó mucho. Además trata temas sobre la división de castas en la India y les presenta cómo es Kerala. Muy recomendado.

3. El apocalipsis es en ocho días: ¿cuál libro eligirías para que fuera tu última lectura?



Aquí no hay ninguna duda que voy a elegir mi libro favorito. Hace tiempo que no lo menciono en un booktag, así que este es quizá un buen momento para resucitarlo. Leería, al último, Diablo Guardián de Xavier Velasco. Es mi libro favorito de todos los tiempos. Me encanta cómo está contando, me encanta la voz de la narradora, Violetta R. Schmidt y me sé el principio de memoria. Sin duda sería un libro maravilloso para leer antes del apocalipsis. Además, que si quedan ocho días, yo leería, por lo menos, cinco libros más. Eso sí, me tienen que avisar que se viene el apocalipsis.

4. Space boy: un personaje de un libro que sea el líder, pero que no parezca uno



Casey Brinke del nuevo run de Doom Patrol (escrito por Gerard Way, ilustrado por Nick Derington). Es el personaje que vuelve a unir a la Doom Patrol y la que tiene más papeletas de líder, pero que también tiene más papeletas para Hufflepuff (un poco como Luther, que es leal a morir y trabajador y no se ve muy líder de lejos) y que se esfuerza mucho para ser una especia de líder aunque no tenga todas las papeletas consigo. (Ya les contaré más en la reseña de este comic que merece una reseña hecha y derecha).

5. Throwing knives: ¿qué arma *literaria* incluirías en tu arsenal?


¿Han visto La rebelión del atlas de Ayn Rand? Le tengo cero y ningún aprecio, por lo que me parece el libro perfecto para lanzarle a alguien. No recomendado por mí, necesito decir.

6. I heard a rumor: Un libro con una trama engañosa



Creo que este puesto se lo merecen todos los volúmenes que he leído hasta el momento de The Wicked + The Divine, escritos por Kieron Gillien e ilustrados por Jamie McKelvie. La trama siempre, siempre, siempre, siempre busca engañarte, hacerte sacar todas las conclusiones falsas del mundo, llevarte por todos los lugares incorrectos para distraerte. Así que sí, este puesto en esta consigna lo tienen muy bien merecido. Fuera de todo el resto, es un comic que les recomiendo mucho. Estoy esperando que salgan ya las dos últimas issues para hacer una reseña que lo enmarque todo y poder recomendárselos con amor.

7. Klaus: un libro que incluya a la muerte/fantasmas/etc.



¿Qué mejor para esta consigna que un libro narrado por la misma muerte? Definitivamente voy a mencionar a La ladrona de libros de Markus Zusak, que es un libro narrado desde la perspectiva de la propia muerte. Ocurre en Alemania, durante la segunda guerra mundial y la protagonista es Liesel Meminger, la ladrona de libros. Cuando lo leí me encantó que estuviera narrado por la muerte y que esta fuera un personaje más, así que me parece un libro perfecto para mencionar en el lugar de Klaus, que sin duda es uno de mis personajes favoritos de la serie (cosa que también tiene que ver con el hecho de que lo interpreta Robert Sheehan).

8. The boy: recomienda un libro que juegue con el tiempo



¡Uno de mis libros románticos favoritos! El romance no es mi género y no tengo demasiados favoritos, pero uno de ellos juega precisamente con el tiempo: La mujer del viajero en el tiempo de Audrey Niffenegger. Me encanta como juega con los viajes en el tiempo para escribir una historia de amor. Henry DeTamble y Claire Abshire están enamorados. Él no la conoce. Ella sí lo conoce a él. Él viaja en el tiempo, pero no puede controlar esta habilidad. A dónde va, cuánto dura el viaje. La novela me encanta, además porque nadie se pone de acuerdo para clasificarla en un género: para mí es la perfecta novela romántica de ciencia ficción.

9. Vanya: un personaje con potencial escondido




Creo que todos saben (porque lo dije en mi reseña) que The Raven Boys de Maggie Stiefvater no fue mi libro preferido en ningún caso, pero que me pareció que Ronan Lynch tenía potencial. No he leído el segundo (que he oído está dedicado a él), pero sigo creyendo que Ronan es un personaje con mucho potencial de desarrollo y que me parece que es una mina de oro escondida. Quiero saber cómo se desarrolla el asunto. Así que quizá pronto lea el segundo libro. Pronto. En algún momento.

10: Luther y Allison: una pareja cuestionable de algún libro y por qué te gustan o no



Creo que este es el momento en el que les cuento que leí Flores en el ático de V. C. Andrews cuando tenía catorce años y que Cathy y Chris me obsesionaron durante toda mi adolescencia. Es una pareja que me gusta y que odio. Me gusta en Flores en el ático, me desespera en todo el resto de los libros (que no considero tan buenos). En fin, es una pareja muy cuestionable porque son hermanos y además de todo, son una pareja con dinámicas terribles... y además de eso su entorno no les ayudaba en nada. En fin, me gusta Flores en el ático (y solo Flores en el ático). Y Chris y Cathy, pese a todo lo cuestionables que son, me parecen interesantes de leer.

11. Hazel y Chacha: un dúo mortal de algún libro



No sé si exactamente sean mortales, pero sí creo que son un dúo al que no es buena idea teener en contra: se trata de Jacob Reckless y Fux, de la saga Reckless de Cornelia Funke. Son de mis protagonistas favoritos de los últimos tiempos en cualquier saga juvenil. Y no es buena idea tenerlos de enemigos.

12. Goodbye: El mejor final de un libro



¡Tengo muchos finales favoritos! Lamentablemente no se los puedo contar porque no les voy a spoilear ningún libro así que sólo voy a aprovechar para hacer full circle a decir que uno de mis finales preferidos es el de Máquinas Mortales. La frase del final me parece que resume la identidad de la historia, de los personajes y del mensaje que quiere dejar Philip Reeve sobre qué estaba escribiendo. Obvio lo estoy volviendo a mencionar para hacerles énfasis en que deben de leerlo.

Bueno, voy a aprovechar para taggear a una persona en este booktag y esa es Raquel del canal Hitzuji Books, porque sé que va a adorar este booktag. ¡Nos vemos en la próxima entrada!