Divagaciones de una Poulain
by Nea Poulain

viernes, 21 de agosto de 2020

Tres autoras en la ficción especulativa

Decir ficción especulativa se refiere a esa denominación que engloba engloba los géneros de ficción con mayor grado de fantasía e imaginación. La fantasía, la ciencia ficción, el terror, todo lo que de ellas se desprende. Un tema común en este blog en los últimos tiempos. Sobre todo considerando que en Librosb4tipos este año nos dedicamos a toda la literatura de la imaginación y a todos estos géneros dentro de América Latina. Hoy traigo tres reseñas cortas de tres libros diferentes que me gustaron y que elegí englobar en una sola entrada para hablar de varios temas. 

Ya me he repetido unas cuantas veces, pero algo que me encanta de las obras que pueden considerarse que están dentro que los géneros que engloba la ficción especulativa o que son híbridos de estos es cómo se aproximan a lo humano. Podemos hablar de cuentos que ocurren en marte y tan "irreales" como nos parezcan ahora, hablan de las emociones humanas o de sucesos que entendemos. Pasa con Kalpa Imperial y su imperio más vasto, por ejemplo, la reseña anterior en el blog. Pasa con las Tierras Fértiles de Liliana Bodoc y su guerra contra Misáianes. Pasa con el Castillo Ambulante de Diana Wynne Jones y con Sophie y Howl (nunca he hablado de ese libro en el blog y apenas lea lo que le sigue, prometo traerles la reseña). Pasa también con una de las autoras de las que voy a hablar hoy: Úrsula K. LeGuin, que en La mano izquierda de la oscuridad propone otro tipo de civilización que finalmente entendemos porque al fondo todas estas historias están sentimientos y cosas que entendemos como seres humanos que somos. No quiero extenderme tanto con la introducción, así que sí, vamos a los libros.

Un hada en el umbral de la tierra, Daína Chaviano

Sinopsis: Al desaparecer su padre, dos años atrás, Tomy y su madre, Niza, se han quedado varados y solos en Garnys —un planeta congelado y desierto— en espera de ser rescatados para volver a la Tierra. Extrañas voces los acosan y los sumergen en el miedo y la desconfianza, pero un giro sorprendente cambiará sus destinos. El terror y la esperanza se mezclan en esta historia de ciencia ficción y fantasía que podrán disfrutar tanto los jóvenes lectores como los adultos.

 Mi primer acercamiento a Daína Chaviano lo tuve con la antología Insólitas. Ya les hablé de ella en el blog. En ella, La dama del ciervo, el cuento de Chaviano ilustra perfectamente cómo es que es posible mezclar la ciencia ficción con la fantasía sin tratar a la fantasía como *magia científica*. Me gustó mucho esa mezcla, debo decir y más tarde, leyendo este libro y comentando algunas cosas de él en tuiter, caí en la cuenta de que, efectivamente, estaba escrito más con una estética con la que identificamos a la fantasía que a la ciencia ficción: como un cuento de hadas.

Elegí iniciar esta entrada con este libro porque creo que contar las cosas en la ficción especulativa con esta clave que tienen los cuentos de hadas (que nos han acompañado muchísimos años) es algo que me he encontrado que, para empezar, hacen las mujeres y, para seguir, que me interesa mucho. Leo con más gusto los libros que me recuerdan a los cuentos de hadas y a por qué nos gustan estos cuentos. Un hada en el umbral de la tierra es un libro muy pequeñito sobre un niño en medio de un mundo desconocido, con una poca sed de aventura y una curiosidad que no le cabe en el cuerpo (y no hay que olvidar que de la curiosidad nacen un montón de historias). 

Daína Chaviano

El libro está editado por El Naranjo, editorial mexicana con ilustraciones muy bonitas de Rosana Mesa. Esta editorial siempre me ayuda a sostener por qué las ilustraciones le añaden al texto y a la experiencia de leer y no son simples dibujitos para los niños

Bueno, les dejo la recomendación de Daína Chaviano, escritora cubana: se la considera una de las mayores exponentes de ciencia ficción en América Latina. Después de leer este libro entendí un poco por qué: es maravillosa su manera tan sensible de retratar a las infancias y los mundos desconocidos, esos sentimientos de extrañar a alguien, la soledad de un mundo vacío. Todo eso está en este libro. No dejo de recomendarles que lo lean. En bookmate lo leen aquí.

El nombre del mundo es bosque, Ursula K. LeGuin

Sinopsis:  En el planeta Athshe, el ciclo de la vida, la cultura, las costumbres, los modos mentales nacen y se desarrollan en la estabilidad autónoma del cosmos, pero la llegada de una expedición terrestre cambiará dramáticamente el pacífico modo de vida de los nativos del planeta. Un universo dinámico y en equilibrio que se mantiene en el tiempo de acuerdo con leyes propias que no admiten la intromisión del hombre.

Tengo una historia curiosa de por qué estoy hablando de este libro. A lo largo de El nombre del mundo es bosque lo onírico es muy importante y el mundo-sueño es tan importante como el terrenal. Los sueños y lo onírico es algo que suele ser un tema muy recurrente en la literatura con el que yo estuve en conflicto mucho tiempo.

Aquí les va una historia que quizá tiene poco que ver con el libro, pero mucho conmigo y los sueños. De adolescente leí un libro que era algo así como 200 consejos para escribir una novela. No sé por qué. No me sé el título, no me sé el autor, no me sé nada. Recuerdo que tenía un consejo que todavía considero útil: no tenerlo miedo al verbo dijo y dejar de querer verse pretencioso con variantes si no son necesarias. El resto: recuerdo poco y nada. En general no entiendo la necesidad de dar tantos consejos "para escribir ficción". Sí considero productivo aprender gramática, puntuación y todas esas cosas (yo misma tengo algunos tutoriales de eso) pero no exclusivamente para la ficción, sino porque esa es una manera de aprender a expresar mejor todas nuestras ideas. Por lo demás hay consejos que no entiendo. ¿Quién dice que los adverbios terminados en -mente son el mal? (Sé que salió de un libro de Stephen King, pero para empezar saber usar bien los adverbios en inglés, terminados en -ly, es básicamente ser un dios del inglés y que a él no le gusten no es implicación de nada, ni hay que transportar estas cosas de un idioma a otro). ¿Qué otro decidió que los gerundios eran el mal? En fin, el mercado está lleno de consejos para supuestamente escribir bien, pero a la hora de la hora lo difícil es encontrar ritmo, cadencia, que tus historias muevan a la gente. Quizá por eso ya no me acuerdo del susodicho libro.

Úrsula K. LeGuin

Resulta que tal libro decía que había que limitar los sueños. O evitarlos. Sobre todo evitarlos. No los narres, decía. El autor explicaba que se permitía uno en su manuscrito y luego en la revisión lo borraba. Pura porquería, en resumen. Primero: porque hablar de lo onírico no es fácil ni es un recurso facilón ni nada. Se pueden crear mundos enteros en lo onírico y los señores dadores de consejos, obsesionados con crear libros que quepan en el perfecto modelo de producto y mercancía (cuando la literatura entra ahí porque la hacen entrar ahí, no porque lo sea), odian los sueños.

Este libro me reconcilió con esa idea del mundo-sueño, con la importancia de ellos y su fantasía. También, por supuesto, me parece muy interesante la manera en la que aborda el colonialismo y la comprensión (o más bien, incomprensión) entre distintas especies. Además, me encanta como aborda este amor por el mundo y por vivir en él, no de él. Hacía tiempo que no leía a Ursula K. LeGuin y como siempre salí con una grata sorpresa. Me gustó mucho este libro, también se los recomiendo (no sé si alguien lo edita ahora mismo, su obra se la pasa descatalogada o agotada, pero si saben déjenlo en los comentarios).

Nada que declarar y otras ficciones breves, Anabel Enriquez

Sinopsis: Trece relatos que recorren numerosos tópicos de la ciencia ficción y el cuento fantástico se reúnen en este volumen: Nada que declarar y otras ficciones breves. Escrita con un estilo sobrio e intenso, la ficción especulativa es una vez más pretexto para sacudir el presente y contar con mirada larga las consecuencias de nuestras decisiones cotidianas. Viajes a planetas distantes, o hacia rincones oscuros de la Historia; desde la perspectiva alienígena o desde la actual incredulidad de nuestro tiempo, cada relato escudriña en el espacio interior de nuestra humanidad y aventura un camino hacia el Otro íntimo que nos acecha, cuestiona y completa.

Este libro estuve a nada de comprarlo en digital, pero a cambio me lo encontré en Scribd. ¿Por qué lo andaba buscando? Porque rastree a casi tosas las autoras que me resultaban desconocidas de la antología Insólitas (¿otra vez hablando de ese libro, Andrea?) y pues que este estuviera en digital era una ventaja (los libros de muchas de las latinoamericanas de ese libro no los he encontrado tan accesibles si ellas no son tan conocidas). En Insólitas está el cuento que le da nombre a este libro: Nada que declarar. Esa historia me parece el ejemplo perfecto de como hablar de lo humano desde la ficción especulativa y de como las mujeres en latinoamerica pueden usar la ficción para hablar de nuestras realidades (nunca me callaré sobre ese tema, maigos, nunca).

Anabel Enriquez

Este libro tiene trece relatos de distintas extensiones, todos de ciencia ficción, increíblemente humanos. Es un libro muy cortito (lo leí a pausas, porque así suelo ir con las antologías, pero la verdad es que me supo a poco de lo rápido que se va). El primer cuento me recuerda mucho a nuestra curiosidad sin límites, de saber que hay más allá. Hay otro dedicado a Laika, y a mí todo lo que hable de la pequeña cosmonauta me encanta (su historia es maravillosa y trágica dentro de la carrera espacial).

También se los recomiendo bastante. Si quieren leerlo en Scribd lo pueden encontrar aquí. Yo tengo este link por si no tienen cuenta y quieren probar la plataforma por dos meses gratis (incluye mubi y algunas otras suscripciones extra). Anabel Enríquez, como Daína Chaviano, es una escritora cubana y yo voy a dejar de recomendar a las autoras que me gustan de este lado del mundo el día que me muera y no antes.

domingo, 9 de agosto de 2020

Kalpa Imperial, Angélica Gorodischer | Librosb4tipos

Sinopsis: Kalpa imperial reúne once relatos, once fragmentos de la historia del Imperio Más Vasto que Nunca Existió. Por el narrador sabemos que el Imperio fue destruido y reconstruido infinidad de veces y que su historia vuelve a empezar con cada nueva dinastía de emperadores y emperatrices.

El escenario es siempre el mismo: el montañoso norte, el sur selvático y las ciudades capitales. Las historias son múltiples y diversas. Como la de Bib, el chico esmirriado que pretende refundar el Imperio e inventar un nuevo orden; la del último príncipe de la dinastía de los Orioles y su extraña muerte; la de la huérfana que asciende desde los bajos fondos hasta el trono; la del Emperador Cuarto en las dinastía de los Kiautonor, que manda a construir una ciudad en honor de su amante.

Angélica Gorodischer crea un universo ficcional portentoso, absolutamente propio, donde la distopía se cruza con el realismo, la novela con el cuento, la metáfora sobre el poder con el pequeño drama humano. Publicado por primera vez en 1983, Kalpa imperial marcó un hito en la obra de esta gran autora argentina y la convirtió en una referente ineludible de la ciencia ficción universal.

Quiero empezar esta reseña hablándoles un poco de #ALImaginaria (si ya siguen a la maravillosa colectiva Librosb4tipos seguro saben de que hablo). Este año nuestra dinámica de lectura aborda toda la literatura de la imaginación (fantasía, ciencia ficción, etc) centrada en AMÉRICA LATINA. He repetido ya varias veces en este blog que América Latina tiene muchísimas cosas que ofrecer en cuestión de libros y autoras por conocer y justo esta dinámica ha sido de mis favoritas de lectura precisamente por ello. (Además que por ahí en entradas pasadas hemos discutido que al parecer lo único que nos une como América Latina es que España insiste en saber cómo funcionamos o que Estados Unidos quiera cagarse nuestros gobiernos). Hemos leído a Elena Garro, a Liliaba Bodoc, a Sol Ceh Moo, a Liliana Colanzi, vamos, autoras que han visto ya en este blog. Este mes toca Angélica Gorosdischer y esta reseña busca animarlos a que se unan a la lectura conjunta del mes. ¡Están a tiempo; el libro no es muy largo!


Algo que todavía me arde cuando veo muchas reseñas de cosas del continente (dígamos: México para abajo) es que a veces me encuentro con las frasesitas "no es exactamente ciencia ficción de verdad", "no es fantasía de verdad". Si lo estoy mencionando, pueden asumir que por supuesto que me pasó con Kalpa Imperial. Obviamente la ciencia ficción y la fantasía tienen sus categorías, subgéneros, muchísima gente ha intentado hacer distinciones a la hora de hacer análisis literario o simplemente vender (el alta vs baja fantasía, la épica vs la urbana, la ciencia ficción dura vs la ciencia ficción blanda), pero pasa mucho que de repente hay un desprecio hacia ciertas obras de los géneros. Pasa mucho con autoras y muchísimo con autoras de este continente.

[Llegado a este punto hice una pausa de dos días en la reseña porque nunca escribo de corrido, doy muchas vueltas y a veces eso causa un caos en mi cabeza]. Hablando de lo que estaba hablando arriba. Géneros, subgéneros. ¿Saben algo que me vuelve loca? La necesidad del mercado de etiquetar a la perfección una obra como un producto. Entiendo que las editoriales lo hacen porque son empresas (que luego se nos olvida que lo que quieren es vender y aunque detrás de ellas haya sueños románticos de publicar libros tienen que vender para sobrevivir al capitalismo que hizo de todo el arte un producto). Me deja dando vueltas como esto que hacen las editoriales de meter los libros en una demografía es algo que hacen los escritores después: conciben la escritura como una mercancía desde antes que haya letras en la página. Entiendo que lo hacen porque el sistema editorial (tan basado en los monopolios) ha convencido al mundo de que son unos cuando elegidos los que merecen publicar que la gente lo ve como un fin y no como un medio. ¿A qué va tanta vuelta? (perdón, ojalá poder hablar de todos los temas que tengo en la cabeza todo el tiempo). Pues a que toda esa sobre categorización de repente nos detiene cuando nos encontramos con cosas como ¡Kalpa Imperial!

Meter a Kalpa Imperial en una cajita que nos dijeron que tiene unas características equis es imposible. A mí me parece que es una obra enorme. ¡Enorme! Le doy tantas vueltas que no sé como explicarles lo magnífica que me pareció en una sola reseña. Podría estar aquí horas, dar mil vueltas sobre mi misma y no acabaría nunca.

Primero, quiero resaltar que la narración me transportó al mundo de Las Mil y Una Noches (un día acabaré de leer sus 3000 y tantas páginas, pero voy lento y de repente me acuerdo que lo estoy leyendo y vuelvo a esos relatos orales tan magníficos) y en general a las tradición oral. A veces no lo tenemos muy presente (por toda este elitismo, por todo este culto al libro como objeto, que deja a la historia en segundo plano), pero hay muchas maneras de contar historias. Se cuentan historias con elementos gráficos (todavía tengo pesadillas con papás que, viendo libros para niños me decían: "es que tiene muchos dibujitos"), se cuentan historias con la palabra y la voz. Los cuentos clásicos que conocemos hoy (recopilados por Perrault o los Grimm, por ejemplo) fueron todos contados en la tradición oral. Nuestros mitos y leyendas. El lore que nos rodea. Todo. Y Kalpa Imperial rescata esto con sus narradores. Los contadores de cuentos, los archivistas. Incluso la misma Angélica, que se reserva el tomar la voz ella misma hasta el final (el único cuento narrado desde la vista de lo que diríamos un narrador omnisciente es el último: la voz de la misma autora). Aparecen las reflexiones de un contador de historias en medio de la historia, las interrupciones propias de la oralidad, los saltos. ¡Eso me maravilló!

Kalpa Imperial, a través de varios cuentos, rescata la historia del Imperio Más Vasto. Nos presenta guerras, dinastías, emperadores, simples habitantes, profetas, el norte, el selvático sur, algunos rituales. Y a pesar de ser enmarcada como eso, la historia de un imperio, es un cúmulo de cuentos sobre lo humano. Tiene partes que me maravillaron. Sobre formas de entender el mundo, la Historia (esa que escribimos con mayúsculas). Como dice uno de los subtítulos de la edición que tengo (la original, argentina, publicada en dos tomos): "... el imperio más vasto y poderoso que ha conocido el hombre: un imperio atemporal y ubicuo, y por lo tanto inmediato y actual". Es la mejor manera de describir estas historias. En las páginas de Kalpa Imperial y ese imperio ficticio encontramos

Y esas invenciones, desgraciadamente, se asentaron en crónicas que se escribieron en libros a los que todo el mundo respetó y por lo tanto creyó, solamente porque eran gruesos, difíciles de manejar, aburridos y viejos. También figuraron en leyendas que son esos recitados en los que todo el mundo dice que no cree porque son poco serios y en los que todo el mundo cree precisamente porque son poco serios.
[...]
Yo soy el que les va a contar cómo sucedieron las cosas, porque es a los contadores de cuentos a quienes toca decir la verdad aunque la verdad no tenga el libro de lo inventado, sino otra belleza, a la que los tontos califican de miserable o mezquina.

En la prosa de Gorodischer me encontré una agudeza que llevaba tiempo sin ver en algún libro. Ya me había sorprendido de buena manera con su cuenta Una mujer notable que me encontré en Insólitas (y resultó ser de mis favoritos en esa antología), pero esto me voló el cerebro. ¿Ven ese emoji con una explosión en la cabeza? Eso era yo a cada cuento. Tengo mis favoritos (el de la emperatriz, el de los hurones, el último, el del sur) por motivos totalmente biased, pero realmente es que me parece que todos todos los cuentos tienen cosas muy especiales y que son una excelente colección. Cuentan una historia muy redonda que te abre la curiosidad de una manera increíble. Admiro los libros que hacen eso y despiertan tu creatividad: lo único que yo quería hacer cuando acabé Kalpa Imperial era sentarme a escribir porque mi cerebro no se quedaba en paz (no dejaba de gritar el maldito).

En fin, los invito a leerlo y a participar en la lectura de Librosb4tipos. Nosotras, como colectiva, defendemos que la lectura no tiene por qué ser solitaria, leer en comunidad es muy muy interesante y luego sentarnos a discutir los libros es algo super interesante. La transmisión en vivo será el 30 de agosto a las 5PM en el canal de Hitzuji Books, hora central de México. Los espero por allí.

También sabía que los hombres no piensan. No, no te rías, no piensan. De vez en cuando alguno piensa, es cierto, y lo dice o lo escribe, y eso es tan extraordinario que nadie lo olvida. 

martes, 28 de julio de 2020

No. 6, Atsuko Asano | Reseña

No. 6, portada del manga
S
inopsis: La historia nos traslada a una ciudad distópica, concebida para ser perfecta, donde existe el cuidado para todo ser vivo, donde todos otorgan su lealtad absoluta a la ciudad. Shion, un chico que creció en la élite, elegido para ser el mejor entre los suyos, repentinamente pierde sus privilegios por haber protegido a un fugitivo de la ley que portaba un VC (chip de violencia): alguien que se hace llamar Nezumi (rata en japonés), quien le dice que esa ciudad está hecha para lavarle el cerebro a la gente, aunque Shion ya intuía algo de esto. Cuatro años después, en medio de incidentes por los que se busca culpar a Shion de cometer un crimen en el que no tuvo nada que ver, Nezumi reaparece para salvarlo. Junto a él, descubrirá la verdad oculta detrás de esa ciudad ideal y perfecta conocida como No. 6.

Hace unos meses di toda la lata del mundo con este manga y con sus light novels porque nunca había terminado ninguna de las dos cosas. La cosa va así: era 2013, el manga estaba en emisión, las novelas habían sido traducidas por una persona anónima en el internet (siguen así, nunca han sido traducidas al español o al inglés que yo tenga conocimiento, aunque una vez en Amazon encontré los tres primeros volúmenes en portugués), tenía un pequeño fandom nicho no muy grande dispuesto a conformarse con casi casi cualquier cosa que sonara a boyslove que no fuera terrible y las distopías (aka Los juegos del hambre) estaban en todo su esplendor. Así que sí, había cuatro gatos en internet que las leían. Yo conocía a algunos de esos cuatro gatos y la historia sonaba lo suficientemente interesante como para que yo hiciera el enorme esfuerzo de leerlas. ¿El problema? Entonces era medio mensa para buscar manga (la cosa cambió cuando me gasté cien pesitos en Manga Rock que me duraron como siete años, así que no me quejo, sólo que No. 6 vivía al fondo de los pendientes) y no leía prácticamente en inglés. Había hecho el esfuerzo por Battle Royale porque no se editaba en español en ese entonces (si, ese mundo existió, sea como sea, Los juegos del hambre hizo que Battle Royale llegara al mundo hispano) porque quería leer gore (no me pregunten que clase de adolescente fui, en 2013 tenía diesiciete going on dieciocho), pero el inglés me costaba y me aburría (curioso, ahora que recuerdo, 2013 fue también el año que me desfalqué con las clases de inglés). 

Leí creo que las tres primeras de No. 6 (light novels, apenas si pasaban de las cien páginas) con dolor y sufrimiento y cara de "por qué nadie las traduce al español" (si saben de alguien que lo haya hecho, apunten en su dirección por favor). No terminé novelas completas en inglés hasta más tarde y entonces el resto de las de No. 6 estaban al fondo de mi kindle y me olvidé de ellas mucho tiempo. Hasta que este año vi un par de cosas de la trama y dije "ey, yo quería terminar esto hace mucho". Y me chuté el manga entero y todo lo que quedaba. 

No. 6 llegó al mundo en inglés por varias personas que se sentaron a limpiar scans, traducir cosas del japones, hacer anotaciones al margen y una persona que tradujo las novelas y las puso en internet. Si las quiere leer aquí están o en línea o para descarga en diferentes formatos: No. 6, traducción al inglés (es la única manera de conseguirlos si no lees en japonés, so, there's that). El proyecto del manga quedó abandonado un par de veces (si no mal recuerdo) y más tarde si se publicó en inglés con una traducción oficial (que no leí) y creo creo que en español sólo llegó a España con Ivrea (forever bitter por eso, pero bueno). En fin, yo leí todo esto gracias a los héroes anónimos del internet. ACTUALIZACIÓN IMPORTANTE 26/02/2021: Navegando por un proyecto importante de doujinshis que tengo para el blog, encontré que el grupo de Feel Good Yaoi tradujo las novelas y todo se puede descargar acá y hay otra versión en ratonesyflores. Que vivan los scanlations y los grupos de traducción, de verdad.

Nezushi, panel con Nezumi y Shion

¿Por qué me gusta tanto No. 6? Tiene estos tintes de típica historia de adolescentes luchando contra el gobierno, gobierno que anda experimentando con cosas que no debería experimentar fingiendo que todo está bien mientras cubre un montón de asesinatos, un genocidio y... bueno, esas cosas. Atsuko Asano retrata, entre los protagonistas, una relación muy compleja. Shion y Nezumi se enfrentan a la muerte muchas veces y aprenden a confiar en el otro poco a poco. Son muy diferentes y algo que hizo Atsuko Asano para retratar su relación es que ambos son muy observadores del otro, por diferentes razones. (Ese detalle me encantó y creo que me va a hacer escribir un fanfic de ellos). Shion salva a Nezumi una noche y eso le cuesta su lugar en Kronos, allí donde vive la élite de No. 6. Por eso, acaba viviendo años en Lost Town y, finalmente, es rescatado por Nezumi cuando lo acusan de un crimen que no cometió.

Tiene una relación tirante porque Shion tiene que convivir con el hecho de que No. 6 no es la utopía o la ciudad perfecta que había creído toda su vida (que es algo que se ve desde el principio, por dios, pero bueno, imagínense crecer oyendo la propaganda despiadada todo el tiempo y el saber que la gente desaparece). No. 6 es una ciudad profundamente estratificada. La élite por un lado, el resto por el otro (no nos sonará eso muy a capitalismo... mmm... sospechoso, eh). Nezumi, por su parte, es una víctima de la propia ciudad y, con toda razón, la odia. Sus ideas chocan varias veces aunque se unan con un objetivo en común: la supervivencia y rescatar a Safu, la mejor amiga de Shion, una chica de la élite que desaparece un día misteriosamente. Me encantan sus discusiones porque es muy obvio que ambos son adolescentes viviendo cosas muy terribles, pero en el caos de descubrir quiénes son (adolescentes, finalmente).

Nezushi, panel del manga con Nezumi y Shion
Escena con Shion y Nezumi, manga

Del resto de los personajes, Inukashi es mi favorito. Hay todo un debate sobre el sexo de Inukashi, por cierto. Yo leí las novelas primero y está traducido en masculino así que no busqué demasiado hasta el manga (donde iba de he/him a they/them según que traductor fuera). Luego busqué, sobre todo para buscar qué usaba en japonés e Inukashi se refiere a sí mismo con la forma masculina de "yo" en japonés (ore) y por lo que busqué también mucho neutro así que dejé el asunto allí (aunque considero que ambas traducciones que los grupos de scanlation le hicieron al manga son muy válidas). Igual el resto de los personajes se refieren a él en masculino o neutro todo el tiempo (aunque en el anime creo que sí hay un personaje que se dirige a él en femenino, no sé, no lo he visto). El género de Inukashi nunca se revela a lo largo de la historia, aunque hay pistas por allí o por allá, sobre todo en las light novels. La idea, finalmente, es que sea ambiguo y adoro esa narrativa.

Inukashi
Inukashi

Safu me da lástima (desde el principio su historia va encaminada a la tragedia), Rikida me exaspera y la mamá de Shion es un personaje que admiro. Tiene una fuerza increíble y resalta mucho las labores de cuidados de las mujeres y toda la carga sentimental que muchas veces recae sobre nuestros hombros.

Sobre la trama, es muy cruda. Nezumi también, así que el libro nunca nos deja olvidar eso. En el West Block, fuera de No. 6, existe solo la ley de la supervivencia. A veces la ciudad realiza purgas, además (lo de matar se les da muy bien, considerando que firmaron un tratado en el que se comprometían a no tener ejército... que obviamente tienen, hay que controlar a la población). Shion y Nezumi se internan en el centro de detención, además (el mismísimo infierno, en este caso) para rescatar a alguien. Me gusta mucho toda esa parte porque me gusta todo el significado que tienen los descensos y como cada etapa del plan va haciendo mella poco a poco en los dos personajes.

Nezumi y Shion en No. 6.

En fin, si les cuento más les cuento la trama entera, entonces no. Tango manga como light novels son nueve volúmenes cada una, aunque las light novels tienen más extras. Las segundas, por ser publicaciones periódicas, pueden resultar repetitivas. Eso no es tanto un problema más que cuando las lees de corrido, pero vamos, cada una vuelve a ponerte en contexto al principio y sobre cosas que pasan antes. En total son unas novecientas y tantas páginas, pero si lo juntáramos en un solo libro y obvio condensáramos las partes en donde Atsuko Asano nos vuelve a meter en la historia, quedarían menos. Es algo que ocurre con todas las publicaciones periódicas, no se preocupen.

Se los recomiendo (manga y novelas) si les gustan las distopias, la ciencia ficción, los conflictos morales (adoro adoro adoro a Nezumi y su deseo de destruir la ciudad entera, hasta sus cimientos, tiene big todo lo que existe merece perecer energy); también, supongo si les gusta el boys love. Aquí es nivel hay besos y mala comunicación. Está muy bien retratado y el final deja la puerta abierta para que exista una relación que evolucione y mejore (porque adolescentes que no saben comunicar sus sentimientos del todo más una lucha por la supervivencia es un combo que uff, qué les digo).

Nezumi, No. 6

El arte del manga es de Hinoki Kino, que hizo un trabajo muy muy chingón. Me encanta como dibuja a Nezumi, sobre todo. Me encantó como está dibujado todo todo el manga y ayudó a que le pusiera cara y forma a todos los personajes después de tantos tantos años que no me había puesto al corriente con la historia.

Y ya, eso es todo. Como siempre, me extendí un chingo, pero es que no sé hablar de los libros que me gustan de otra manera. Me queda todo kilométrico. Si lo leen y les gusta, me cuentan. (Que esto tiene un fandom de cuatro gatos y yo quiero escribir un fanfic, cosas que pasan).