Divagaciones de una Poulain
by Nea Poulain

jueves, 14 de enero de 2016

La guerra no tiene rostro de mujer, Svetlana Alexiévich | Reseña

Sinopsis: Casi un millón de mujeres combatió en las filas del Ejército Rojo durante la segunda guerra mundial, pero su historia nunca ha sido contada. Este libro reúne los recuerdos de cientos de ellas, mujeres que fueron francotiradoras, condujeron tanques o trabajaron en hospitales de campaña. Su historia no es una historia de la guerra, ni de los combates, es la historia de hombres y mujeres en guerra.¿Qué les ocurrió? ¿Cómo les transformó? ¿De qué tenían miedo? ¿Cómo era aprender a matar? Estas mujeres, la mayoría por primera vez en sus vidas, cuentan la parte no heroica de la guerra, a menudo ausente de los relatos de los veteranos. Hablan de la suciedad y del frío, del hambre y de la violencia sexual, de la angustia y de la sombra omnipresente de la muerte. Alexiévich deja que sus voces resuenen en este libro estremecedor, que pudo reescribir en 2002 para introducir los fragmentos tachados por la censura y material que no se había atrevido a usar en la primera versión.

Bueno, ¿no les pasa que cuando un libro les parece demasiado bueno no tienen ni idea de qué decir sobre él? Porque a mí me está pasando justo ahora: no sé qué decirles sobre este libro o cómo lo recomendaré. Es ya la segunda vez que reseño un libro de Svetlana y, aunque consideré increíblemente difícil que superara la primera impresión en Voces de Chérnobil, este libro superó todo lo que pensaba. Casi un millón de mujeres se alistaron en el Ejercito rojo durante la segunda guerra mundial y este es el testimonio de sólo algunas de ellas. Muchas murieron, otras fueron enterradas en vida, con sus recuerdos, en una época en la que no se consideraba honorable haber sido parte de las filas del ejército siendo mujer. Sin embargo, al leer en sus páginas, descubres que esa fue la manera en la que fueron educadas esas mujeres: dispuestas a morir por la Madre Patria. Mi padre siempre ha dicho que entre México y Rusia hay muchos paralelismos y es por eso que identificarnos con los libros rusos de la primera mitad del siglo es tan sencillo: pensamos parecido, porque aquí también es honorable morir defendiendo a la patria. O lo era, al menos. 

Lyudmila Pavlichenko, francotiradora. 309 muertes confirmadas,
considerada heroína de guerra
Este es el relato oral de las mujeres que pelearon contra los nazis por su patria. No cuentan la misma historia que los hombres. Como mujeres tenían otros problemas, otras vivencias, incluso veían las cosas de otra manera. Al final, se convirtieron en soldados, pero nunca dejaron de ser mujeres. Mujeres que añoraron sus largas trenzas, sus vestidos, mujeres que se acostumbraron al uniforme y al volver de la guerra la ropa de civil les pareció incómoda, mujeres que escondieron sus condecoraciones, mujeres que no, mujeres que se casaron con soldados y mujeres que escondieron su pasado. Yo tengo veinte años, en este preciso momento, y la mayoría de estas mujeres eran ya abuelas cuando contaron su historia, pero la gran parte era menor que yo cuando fue a la guerra. 

Roza Yegorovna Shanina, francotiradora
¿Qué las hizo hacerse soldados y enlistarse? Para muchas, el deseo de hacer algo, de demostrar que valían, para otras, un padre, un hermano, un esposo muerto, un deseo de venganza. No creo que su visión sea diferente porque la mujer es típicamente más sensible, sino simplemente porque en esa época, a nadie le cabía en la cabeza que las mujeres también podían ser soldados (aunque antes de ellas había estado Juana de Arco, la leyenda de Hua Mulan y otras mil historias de mujeres que habían demostrado su valía en la guerra). En el libro de Svetlana, es increíble lo diferentes que son todas, hay algunas que se quedaron estancadas en la disciplina del frente y con ella criaron a sus hijos, mujeres que hablan de la guerra y mujeres que no lo hacen. Mujeres que nunca se quitaron el uniforme (las que menos) y mujeres que lo escondieron. Esta es su historia, y más lejanamente, la historia del avance alemán en tierras rusas, pero, al estar los testimonios en desorden cronológico, no hay manera de armar una crónica con esto

Siempre he dicho que no hay suficientes historias de la Segunda Guerra Mundial. No sólo historias de judíos, simplemente historias de la Segunda Guerra Mundial, en todos los frentes, en todos los momentos. Historias que, sin apelar a un sentimentalismo extremo, cuenten la crudeza de la guerra. Esta es una historia que lo hace. Algunas de las francotiradoras hablan de la primera vez que mataron a un hombre, lo fácil y lo extraño que resultó o por otro lado, lo difícil y unas incluso se atreven a hablar de los remordimientos que sintieron después, aun cuando sabían todas las barbaridades que hacían los nazis. Las enfermeras que cuidaban a los prisioneros también hablan de la lástima (si no compasión), que acababan por tenerle a los heridos nazis. Hay una que, incluso, narra como al intentar vendar a un soldado alemán, éste intentó matarla y ella simplemente se defendió y lo dejó allí, a su suerte (que, probablemente, sería la muerte). 

Mujeres soviéticas que participaron en la liberación de Crimea
Creo que esta es sólo una parte de la historia de todas estas mujeres, pues los testimnios son de unas 300, cuando mucho (no me hagan mucho caso, no se contar) y las que fueron a la guerra fueron casi un millón. ¿Cómo saber los problemas de todas? ¿Cómo conocer los problemas de todas? ¿Lo que vivieron después de la guerra? Es casi imposible y lo que pasó con ellas, finalmente, es una vergüenza. Justo cuando terminó la guerra fueron rechazadas por las mismas mujeres que se habían quedado atrás: para la gente, ellas sólo habían ido al frente a acostarse con los soldados. Y algunas lo hicieron, algunas no, algunas se enamoraron, algunas se casaron, algunas no encontraron tiempo para el amor. La mayoría sintió que les habían quitado la Victoria soviética de las manos. Que los hombres que las habían visto como hermanitas y protegido hasta entonces las abandonaron a su suerte. 

Natalya Myeklin, aviadora
Porque las mujeres no lo tuvieron fácil para ser reconocidas como soldados. Una de ellas cuenta como, cuando fue comandante de una unidad que se dedicaba a buscar minas, al principio uno de los soldados le escupió y la mayoría se mostraron descontentos. Cuenta que, esos mismos soldados la cargaron el hombros cuando se anunció la Victoria y estuvieron dispuestos a enzarzarse en peleas cada que alguien se atrevía a insultar a su comandante. La mayoría se ganó el respeto de los soldados, incluso las francotiradoras, que fueron tomadas por unas niñas que no sabían a lo que jugaban antes de que empezaran a disparar y probaran ser mejores que los chicos que habían estado disparando en la mañana.

Me gustaría poner muchas más fotos, pero no tengo espacio para hablar de todas ellas o esta sería una entrada que no acabaría nunca. Sin embargo, si quieren escucharlas, vayan y busquen el libro, léanlo. No los va a defraudar. Es uno de los mejores libros que leí en el 2015 y lo leí casi al final. En sus trescientas y pico páginas nunca dejó de sorprenderme, horrorizarme y enternecerme. Porque todas esas mujeres vivieron otra guerra y otra Victoria. Y porque las llevaré siempre en el corazón.    

martes, 12 de enero de 2016

Retos de lectura que voy a (in)cumplir en 2016

¡12 de enero! ¡12 de enero y por fin tengo un día libre para publicar esta entrada! ¡12 de enero! En mi defensa diré que es Diciembre 30 en el momento que estoy escribiendo este párrafo y que tengo tantas entradas atrasadas y ya programadas que simplemente este es el primer día que esta entrada puede ver la luz (además de que estoy esperando que salgan más retos). Por otra parte, ya sé la cara que van a poner todos: si el único reto que en mi vida he podido cumplir ha sido el Goodreads Reading Challenge, simplemente porque sólo tenía que leer mucho y yo me fijaba la meta, ¿por qué carajos me sigo anotando a los Retos de Lectura? Saben, mi conciencia también se lo pregunta, más con una entrada tan kilométrica.

Mi conciencia.

Reading Challenge 2016 (popsugar)





Un libro basado en un cuento de hadas:
Un ganador del National Book Award: Challenger Deep, Neal Shusterman.
Un best-seller YA: After, Anna Todd.
Un libro que no hayas leído desde la preparatoria:
Un libro ambientado en tu estado: Mar Negro, Bernardo Esquinca.
Un libro traducido al inglés: El beso de la mujer araña, Manuel Puig.
Un romance situado en el futuro: Illuminae, Amie Kaufman & Jay Kristoff.
Un libro ambientado en Europa: El cuentacuentos, Antonia Michaelis.
Un libro de menos de 150 páginas: Chicana Falsa, Michelle Serros.
Un best-seller del New York Times: Ms. Marvel Vol 1: No Normal, G. Willow Wilson.
Un libro que se convierte en película este año: Room, Emma Donoghue. (Se acaba de estrenar en México).
Un libro que te recomiende alguien a quien acabas de conocer: Hermano Lobo, Carla Maia de Almeida (recomendado por un señor en la FIL Minería).
Un libro que puedas terminar en un día: La más densa tiniebla, Antonio Malpica.
Un libro escrito por una celebridad: Besos entre líneas, May R. Ayamonte & Esmeralda Verdú.
Una biografía/autobiografía política: A long way gone, Ishmael Beah.
Un libro de autoayuda: All about love: New visions, bell hooks.
Un libro que sea más de 100 años mayor que tú: Las cartas de Abelardo y Eloísa, Pedro Abelardo (y Eloísa).
Un libro de más de 600 páginas: El segundo sexo, Simone de Beauvoir.
Un libro del club de lectura de Oprah:
Un libro de ciencia ficción: Frankenstein, Mary Shelley.
Un libro recomendado por alguien de la familia: Mujer que sabe latín..., Rosario Castellanos. (Mi padre, sin saber en realidad de qué se trataba).
Una novela gráfica: Footnotes in Gaza, Joe Sacco.
Un libro publicado en 2016: El fuego en el que ardo, Mike Lightwood.
Un libro cuyo protagonista tenga tu misma ocupación: Soma. La tumba de Alejandro, María García Esperón.
Un libro que tenga lugar en el verano:
Un libro y su precuela:
Un libro de misterio con un asesinato: Siete esqueletos decapitados, Antonio Malpica.
Un libro escrito por un comediante: Bossypants, Tina Fey.
Una distopia:
Un libro con una portada azul: Men Explain Things To Me, Rebecca Solnit.
Un libro de poesía: Soy vertical, pero preferiría ser horizontal, Sylvia Plath.
El primer libro que veas en una librería: Persona Normal, Benito Taibo.
Un clásico del siglo XX: Sula, Toni Morrison.
Un libro de la biblioteca: Borderlands/La Frontera: The New Mestiza, Gloria E. Anzaldúa.
Una autobiografía: My Life on the Road, Gloria Steinem.
Un libro acerca de un road trip: Carol, Patricia Highsmith.
Un libro de una cultura con la que no estés famirializado: Americanah, Chimamanda Ngozi Adichie.
Un libro satírico: El eterno femenino, Rosario Castellanos.
Un libro que tenga lugar en una isla: In the name of Salomé, Julia Alvarez.
Un libro que esté garantizado para traerte alegría: #MásGordoElAmor, Antonio Malpica.

África en 8,000 Km



Este reto es originario de Un kilo de libros y como yo quiero leer a autores africanos me pareció perfecto para animarme a hacer una pequeña lista de libros que quiero leer. Lo que hay que hacer es planificar una ruta por África, que recorra al menos, 8,000 Km del continente y rellenarla con libros. Esta idea me fascino porque así evito que me quedé estancado sólo en los autores Nigerianos. ¿Les dejo mi ruta? Pasaré por Sierra Leona, Nigeria, Sudáfrica, Somalia, Zimbaue y Etiopía, un libro a la vez. Me gustó un ojo y la mitad del otro conseguir los libros, así que por eso sólo son cinco de momento.


Avance del reto 13/01/16: Estoy en el Km 0, Sierra Leona. ¡Lista para empezar!
Avance del reto 13/03/16: Terminé A long way gone, de Ishmael Beah. 2444.1 km recorridos, estoy en Nigeria.
Avance del reto 10/08/16: Terminé Half of a Yellow Sun de Chimamanda Ngozi Adichie. Me voy a Sudáfrica.

Reto para lectores lentos


Juro que no es una broma; el reto es de Sólo un capítulo más. Me gustaron las categorías y al final me dejaron hacerlo si lo hacía tres veces porque rogué el tiempo suficiente. La prueba de que apesto en los retos es que lectores realmente lentos llevan ya dos libros (hoy, 12 de enero) y yo llego la maravillosa cantidad de cero patatero. Los ignoro la mitad del tiempo. En fin, les dejo la imagen. 



El último libro que llegó a tu estantería en 2015 y que aun no hayas leído: Sor Juana Inés de la Cruz o las trampas de la fe, Octavio Paz.
Un libro basado en una historia real: Footnotes in Gaza, Joe Sacco.
El primer libro de un autor famoso:
Un libro de un autor que te guste que no hayas leído: Challenger Deep, Neal Shusterman.
Un libro que haya sido prohibido en algún lugar/momento:
Un libro de más de 500 páginas: El segundo sexo, Simone de Beauvoir.
Un libro con malas críticas: After, Anna Todd.
Un libro que este de aniversario: 25 años, How the García Girls Lost Their Accents, Julia Alvarez.
Un libro que pertenezca a una saga: How to train your dragon, Cressida Cowell.
Un libro que no recuerdes por qué compraste: El perfume de la faraona, Kyra Galván.
El libro más antiguo que tengas sin leer en tu estantería: El beso de la mujer araña, Manuel Puig.
Un libro muy famoso/con mucho hype que todavía no hayas leído: Illuminae, Amie Kaufman & Jay Kristoff.
Un libro de un autor autopublicado: Se venden sueños, Sofía Olguín.
Un libro de un género que casi no hayas leído: Soy vertical, pero preferiría ser horizontal, Sylvia Plath.
Un libro con un premio Hugo: Ms. Marvel Vol 1: No Normal de G. Willow Wilson.


Desafío Read It! 2016



El desafío es de Nina del blog Rapsodia Literaria y consiste en leer cierta cantidad de libros en inglés. Hay tres niveles diferentes: Noob, Learner y Master, según la cantidad de libros qué quieras leer en inglés. Yo me apunto en Master, que es de más de 11 libros y, para hacerlo interesante, viendo la cantidad de libros que leí en inglés el año pasado, mi meta serán treinta. Los avances, con los respectivos links a las reseñas, si las hay, aquí debajo:

  1. Chicana falsa, Michelle Serros.
  2. Bad Feminist, Roxane Gay.
  3. Everyday Sexism, Laura Bates.
  4. My Life on The Road, Gloria Steinem.
  5. How to Train Your Dragon, Cressida Cowell.
  6. Men Explain Things To Me, Rebecca Solnit.
  7. Footnotes in Gaza, Joe Sacco.
  8. Illuminae, Amie Kaufman & Jay Kristoff.
  9. Challenger Deep, Neal Shusterman.
  10. All about love: New visions, bell hooks.
  11. Borderlands/La Frontera: The New Mestiza, Gloria E. Anzaldúa.
  12. A long way gone, Ishmael Beah.
  13. In the Name of Salone, Julia Álvarez.
  14. How the García Girls Lost Their Accents, Julia Álvarez.
  15. How to be a pirate, Cressida Cowell.
  16. Room, Emma Donoghue.
  17. When I was Puerto Rican, Esmeralda Santiago.
  18. The Secret Diary of Lizzie Bennet, Bernie Su & Kate Rorick.
  19. Everything, Everything, Nicola Yoon.
  20. Americanah, Chimamanda Ngozi Adichie.
  21. In The Shadows, Joseph Lidster.
  22. The Sin Eaters, Brian Munchin.
  23. Massacre of the Dreamers, Ana Castillo.
  24. Half of a Yellow Sun, Chimamanda Ngozi Adichie.
  25. The Book of the Unknown Americans, Cristina Henríquez
  26. Bossypants, Tina Fey.
  27. The Geek Feminist Culture, Kameron Hurley.
  28. I Know Why The Caged Bird Sings, Maya Angelou.
  29. I am Malala, Malala Yousafzai

Desafío curioso 2016



El reto es de Libros y Misterios y es especialmente sensual y malévolo. Es compatible con otros retos y se trata de buscar 20 cosas en 20 libros. Aquí las categorías (y los comodines que intentaré no utilizar): 
  1. Libro con más de 888 páginas. El segundo sexo, Simone de Beauvoir. 912 páginas.
  2. Libro con un personaje asiático/oriental. Illuminae, Amie Kaufman & Jay Kristoff. Byron Zhang.
  3. Libro ambientado en las zonas polares. Frankenstein, Mary Shelley. Zonas polares, cerca de Rusia.
  4. Libro cuyo título tenga más de 25 letras. Borderlands/La Frontera: The New Mestiza, Gloria E. Anzaldúa. Tiene 34 letras.
  5. Libro protagonizado por un niño/a. A long way gone, Ishmael Beah. Lo protagoniza el mismo Ishmael, como niño soldado en Sierra Leona.
  6. Libro cuyo primer párrafo sea una sola frase. La más densa tiniebla, Antonio Malpica. «Cuando Karen subió al automóvil, decidió que todo tenía que ser perfecto.»
  7. Libro con un cuadrado amoroso. After, Anna Todd. Molly/Hardin/Tessa/Noah o Zed/Hardin/Noah/Tessa o... Bueno, se entiende.
  8. Libro en el que se mencione un clásico. Persona normal, Benito Taibo. Todos los libros de Salgari, el Corazón de las Tinieblas de Joseph Conrad, poemas de García Lorca.
  9. Libro que transcurra en invierno. El cuentacuentos, Antonia Michaelis. El libro termina el 12 de marzo, con la nieve derretida.
  10. Libro cuyo título empiece con Z.
  11. Libro juvenil sin romance. Challenger Deep, Neal Shusterman. No hay ni pizca de romance, sólo amistad.
  12. Libro protagonizado por un detective. Siete esqueletos decapitados, Antonio Malpica. Uno de los protagonistas es un detective policía, Guillén.
  13. Libro publicado antes de 1700. Las cartas de Abelardo y Eloísa de Pierre Abélard, publicado originalmente en 1133.
  14. Libro leído en un día. Se venden sueños, Sofía Olguín. Leído completo el 16 de marzo de 2016.
  15. Libro con un ave en la portada. Mujer que sabe latín..., Rosario Castellanos. Tiene un grabado de un pájaro en su portada.
  16. Libro en el que aparezca una araña. Room, Emma Donoghue. Aparece Spider (Araña) dentro de La Habitación.
  17. Libro que haya ganado el premio HugoMs. Marvel Vol 1: No Normal de G. Willow Wilson. Premio Hugo por Best Graphic Story.
  18. Libro con un personaje con discapacidad. Sula, Toni Morrison; Eva, la abuela de Sula, tiene sólo una pierna.
  19. Libro que tenga adaptación televisiva. The Secret Diary of Lizzie Bennet, Bernie Su & Kate Rorick. La webserie The Lizzie Bennet Diaries.
  20. Libro en el que se mencione una canción.  #MásGordoElAmor, Antonio Malpica. Looking For That Girl, Tim McGraw.
Comodines
  1. Libro con una portada azul. El hilo de oro, Cornelia Funke; la portada es azul claro.
  2. Libro conseguido en la biblioteca. Chicana Falsa, Michelle Serros; lo pedí prestado en la Open Library.
  3. Libro con una sola palabra en el título. Illuminae, Amie Kaufman & Jay Kristoff. Illuminae es una sola palabra. Ejem.

Bingo Literario 2016


Es de Nina del blog Rapsodia Literaria y por supuesto, trata sobre jugar bingo. Tiene tres niveles, basados en Star Wars, empezando por Luke Skywalker, que consiste únicamente en completar dos líneas, Obi Wan Kenobi, que consiste en hacer el cuadro exterior y, por supuesto, Yoda, que consiste en hacerlo todo. ¿Adivinen a qué me apunté yo? Sí, Yoda

Avances en la imagen, y aquí debajo.
  1. Un libro de un autor de tu país: Persona normal, Benito Taibo.
  2. Un cómic o una novela gráfica: Skandalon, Julie Maroh.
  3. Un libro gracioso: #MásGordoElAmor, Antonio Malpica.
  4. Un libro con la portada amarilla: When I was Puerto Rican, Esmeralda Santiago.
  5. Un libro que tenga un premio: Challenger Deep, Neal Shusterman.
  6. Un libro situado en USA: After, Anna Todd.
  7. Un libro de relatos: Mar Negro, Bernardo Esquinca.
  8. Un libro de no ficción: Everyday Sexism, Laura Bates.
  9. Un libro de ciencia ficción: Frankenstein, Mary Shelley.
  10. Un libro situado en otro mundo: Loba, Verónica Murguía.
  11. Un libro de otro continente: A long way gone, Ishmael Beah.
  12. Un libro con magia: In The Shadows, Joseph Lidster.
  13. Cuatro libre: Sor Juana Inés de la Cruz o las trampas de la fe, Octavio Paz.
  14. Un libro con más de 500 páginas: Illuminae, Amie Kaufman & Jay Kristoff.
  15. Un libro con más de 50 años: Carol, Patricia Highsmith.
  16. Un libro con amor: El cuentacuentos, Antonia Michaelis.
  17. Un clásico: Persuasión, Jane Austen.
  18. Un libro escrito por una mujer: Sula, Toni Morrison.
  19. Un libro que inicia una saga: How to train your dragon, Cressida Cowell.
  20. Un libro infantil: La más densa tiniebla, Antonio Malpica.
  21. Un libro que da miedo: The Sin Eaters, Brian Munchin.
  22. Un libro con portada fea: Chicana Falsa, Michelle Serros.
  23. Un libro con un mapa: El hilo de oro, Cornelia Funke.
  24. Un libro que tenga película: Room, Emma Donoghue.
  25. Una distopía:


domingo, 10 de enero de 2016

Dash & Lily's Book of Dares, Rachel Conn & David Levithan | #LCNCuadernoParaDos

Sinopsis: Por un momento, imagina que eres un joven de 16 años, elegante y con un punto snob: La Navidad está a la vuelta de la esquina; en Nueva York todo está preparado para las fiestas, aunque prefieres refugiarte en tu librería preferida y perderte entre las estanterías donde se esconden los libros de tus autores favoritos. Mientras vas señalando los lomos de las novelas que amas y que te sabes de memoria, te topas con un cuaderno rojo que asoma desafiante... ¿Qué harías? ¿Abrirlo? Parece ser que se trata de la Moleskine que la joven Lily dejó ahí, repleta de retos esperando a que un chico atrevido, lo encontrara. ¿Serás tú ese chico? ¿Aceptarás los desafíos de Lily? Así comienza la última novela romántica en clave de comedia de los dos aclamados autores, Rachel Cohn y David Levithan.

Esa sinopsis que publicaron en Goodreads tiene una de errores que la tuve que corregir un poco. Aunque dejé ese número en cifras, cuando debería estar en letra y... vale, en general no me ha gustado esa sinopsis porque estoy convencida de que las editoriales contratan a monos drogados para que las escriban (y siento que estoy insultando a los monos adictos). En fin, ya les conté que participé en la Lectura Conjunta organizada por Dear Jane y Another Little Book. Esta es, y no miento, la primera lectura conjunta en la que no voy a poner al libro a parir. No sé si eso habla mal de las lecturas conjuntas en las que participo o de mí, pero por decirlo... 

Bueno, empecemos y, como dijo Jack el Destripador, vamos por partes. (En serio, consíganme un chiste nuevo, 100 puntos para Slytherin para el que me lo diga). 

Primero, los protagonistas (y los personajes en general). Dash y Lily son dos protagonistas bastante bien definidos (quizá por algunos detalles tontos), pero bien definidos. De ellos, a quien prefiero, es a Dash, porque desde el principio se nota que Levithan escribe sus capítulos. No tiene que decirnos que es un aficionado a la gramática del idioma inglés, sólo tiene que decirnos que encuentra rara y mal escrita la expresión "an history" (cuando debería ser "a history") y decirnos que lo que más desea para Navidad es el Oxford de la lengua inglesa (o algo así, no sé como se traduce), veintiséis tomos. Por otro lado, no le gusta navidad y sin que nos explique nada cuando es narrador, nos damos cuenta de que le falta mucha comunicación con sus dos padres (especialmente con su padre). Eso es el show, don't tell (mostrar y no contar) bien usado que tanta falta le hace a los libros juveniles. A Lily no le va tan bien en ese aspecto, pero tampoco falla estrepitosamente: al parecer le gusta describirse a sí misma como una chica rara, medio nerd, y por la forma de interactuar con los personajes, me pareció, más que rara, simplemente tímida e insegura. En cuestión de familia, es todo lo contrario a Dash: le duele que ninguno de sus dos padres esté presente en navidad y la relación que tiene con su hermano se siente cercana. 


El resto de los personajes están mucho menos dibujados, pero al menos no son una masa sin forma que habla y piensa de la misma manera. Las menciones honoríficas van para Boomer, el amigo de Dash y el abuelo de Lily. Me parecieron de lo mejor. Entre lo que me sonó raro estuvo Sarah, que por su manera de hablar y dirigirse a Dash parecía al menos diez años mayor. Lo bueno es que, fuera de los pensamientos de Dash y algunas escenas, su papel no es algo que realmente se robe el protagonismo. Pero bueno, ya pueden poner que, en el ámbito personajil, este libro aprueba con creces porque sus dos protagonistas me parecieron personajes muy bien formados, desarrollados y que van evolucionando (Dash menos que Lily) a lo largo del libro.

Ahora, ¡la trama! Quizá aquí la cosa se tenga que poner un poco espinosa pero eso es porque yo ya me convencí de que soy una perfeccionista de mierda (empiezo a pensar que es un defecto) y le pido demasiado a libros como este. Bueno, empecemos: la idea del cuaderno es genial, maravillosa, es una premisa so fucking genius que hasta me sacó una sonrisa varias veces durante los primeros capítulos. Su desarrollo hasta poco después de la mitad me pareció como esa clase de cosas que sólo van a pasar en los libros y en las películas, pero me lo creía de manera muy fácil. La cosa con los libros está no en que sean lo más realistas posibles, sino en que te hagan creer que el tipo de cosas que estás leyendo son cosas que te pueden pasar en cualquier momento

Sin embargo, aquí va la queja: hubo un momento en el que sentí que la trama estaba tomando una dirección que sólo podía aterrizar en un monstruoso cliché de película navideña que no me apetecía sentarme a ver. No es en todo el libro, pero pasa. Por suerte luego las cosas se enderezan un poco y la vida sigue. La trama es simplona, sencilla, no tiene demasiadas pretensiones (exceptuando los largos párrafos que los dos adolescentes escriben en el cuaderno filosofando sobre la vida que sólo les creo porque fui adolescente y estoy convencida de que es una etapa en la que estás totalmente drogado todo el tiempo). No creo que haya que esperar más de ella, ¡por Dios! ¡Es un libro navideño! (Y yo soy bien grinch todavía me estoy preguntando por qué participé en la lectura, pero como me gustó un poquito el libro...) 

Sobre la narración, prefiero mil veces a Dash que a Lily. Cuando al final leí que Levithan escribía los capítulos de Dash y Rachel los de Lily, entendí por qué. Los dos estilos (o formas de escribir) se parecen mucho, pero el de Rachel no es algo que recordaría, es mucho más plano y anodino, mientras que a Levithan lo puedo reconocer en cualquier parte (no es que lo adore... es que lo nuestro es amor apache) y es algo que se me queda grabado.


Sobre los diálogos, ¡naturalidad, por Dios! No sentí que estuviera ante un par de adolescentes que hablan como viejos del siglo pasado, pero a veces, en los momentos donde aparecía Sarah o el hermano de Lily, sentía que les faltaba naturalidad, que ni siquiera en inglés un adolescente hablaría así. Por suerte no pasa todo el libro y son detalles aislados que no hicieron subir demasiado a mis cejas. 

En resumen, este libro no me hizo amar más la navidad (no, no creo que nada lo haga), pero sí me hizo pasar un buen rato, a pesar de las pocas quejas que tengo. Ahora, ¿lo recomiendo? Sinceramente, no lo sé. Creo que es de esos libros que tiene que llegar en el momento indicado, no porque sea demasiado bueno, sino porque es un libro muy anodino, no es Un cuento de navidad (lo que yo amo ese libro no es normal) o un clásico. Dudo que llegue a ser un clásico en algún punto del universo, pero eso no le quita que es un libro disfrutable, que quizá conviene leer en navidad (si no son unos completos grinchs como yo) y que la verdad les puede hacer pasar un buen rato. 

¡Ey! ¡Esto fue un logro! Primera lectura conjunta donde no pongo al libro a parir chayotes.

viernes, 8 de enero de 2016

Oscars Literarios (V)

¡Llegaron los premios a lo mejor del año! La sección nació en Ratonera de un cuasi-escritor, y la creo mi fantabuloso amigo Dann, que sólo la hizo una vez y yo me quedé con ella. Este es el quinto año que la hago y cada vez se hace más grande así que... ¡allá vamos!


Mejor trama


Las uvas de la ira, de John Steinbeck. En los años de la depresión, la gente empezó a emigrar hasta el oeste, hacia California, en camiones, con toda su familia, desesperada por encontrar trabajo y algo para vivir (o sobrevivir, porque la desesperación ya era mucha). Esta es la historia de la familia Joad, que tenían un buen pedazo de tierra antes de que llegaran los tractores a arrasar con todo y se vieran obligados a emigrar a California. El libro (y su trama) nacieron cuando John Steinbeck redactó una serie de artículos después de recorrer California y ver la situación de todos los migrantes, una situación parecida a la que hoy enfrentan los migrantes mexicanos. Steinbeck se pone en la piel de los más desafortunados, que tienen que trabajar hasta por cinco centavos la hora, y, en la desesperación, aceptan esa clase de trabajos sólo para poder aspirar a sobrevivir, ya no vivir, siquiera. Uno de los mejores libros que leí este año, totalmente recomendado, sobre todo si les interesa lo social y problemas de este tipo.
La gente viene con redes para pescar en el río y los vigilantes se lo impiden; vienen en coches destartalados para coger las naranjas arrojadas, pero han sido rociadas con queroseno. Y se quedan inmóviles y ven pasar las patatas flotando (...) en las almas de las personas las uvas de la ira se están llenando y cogen peso, listas para la vendimia

Mejor escritor



Chimamanda Ngozi Adichie. Ella fue uno de los descubrimientos de este año. No hay duda de que es una mujer muy talentosa y, además, inteligente. Yo he leído únicamente su libro Algo alrededor de tu cuello, reseñado en Plusbits y la transcripción (casi) de tu TED Talk: We should all be feminists (además de haberla visto varias veces). Me apena reconocer que esta es la primera vez que leí algo de una escritora africana, y más que africana, nigeriana, y más que nigeriana, igbo. Escribe de manera maravillosa, se nota que le gusta su cultura y que quiere que su cultura se conozca. No la trata como si fuera algo sagrado, sino como lo que es, habla de sus tradiciones y de cómo han cambiado en el mundo moderno, de su gente, de los migrantes, de todas las penurias que tienen que pasar en un país que hace poco ha salido de la guerra civil. Si quieren saber más de ella, les recomiendo su otra TED Talk: The Danger of a Single Story.


Mejor protagonista masculino


Jude St. Francis de A Little Life, Hanya Yanagihara. El libro de Yanagihara destaca por muchas cosas y una de ellas es, especialmente, los personajes y lo bien desarrollados que están a lo largo de, más o menos, veinte o treinta años de su vida. Sin embargo, quien más se lleva los reflectores es Jude, quien al principio es un misterio, un enigma incluso para sus amigos que no lo conocen más allá de su tiempo en la universidad. Ninguno sabe de dónde viene Jude o todo por lo que pasó antes. Sin embargo, tiene algunas características muy marcadas: tiende a disculparse todo el tiempo, no soporta que le tengan lástima y suele tener grandes depresiones. Cuando empieza el libro lo encontramos así y conforme el libro avanza descubrimos de donde viene y por donde ha pasado. Uno de los mejores desarrollos de personajes que he visto.

Mejor protagonista femenino


Nimona de Nimona, Noelle Stevenson. Esta es la protagonista de una novela gráfica (que antes fue webcómic). Nimona es un shapeshifter, una cambiaformas, y tan pronto puede ser un dragón, como un ratón, como un tiburón. Quiere ser la maldad personificada y no para de tener planes, todo el tiempo, en los que los asesinatos están a la orden del día, mientras que su jefe es mucho más escrupuloso. Malvado, también, pero villano con principios, como diría cada quien. Nimona teme a la ciencia, odia los experimentos y no se preocupa por entender realmente cómo funciona la magia que tiene en su interior. Vive en el momento y ya está.



Mejor novela gráfica



Persépolis de Marjane Satrapi. Tuve serios dilemas con esta categoría, porque leí Maus y Persépolis casi juntas y no hay duda de los logros de Maus: ha sido la única novela gráfica en toda la historia galardonada con un Pulitzer. Sin embargo, el carácter feminista y sumamente personal de Persépolis me ganó y fue esto lo que leí. Podrán decir que está de moda últimamente, pero su valor no cambia (de moda o no). Persépolis retrata la revolución en Irán y, más que otra cosa, sus consecuencias: el uso del velo, los niños soldado, las prohibiciones, la policía de la moral... Además que habla del choque cultural entre Irán y los países occidentales. Marjane se encontró con una sociedad europea libre, sí, pero no se detiene a la hora de juzgarlos: tanta libertad le parece mala, contraproducente y no sabe realmente qué hacer con ella. Para una mujer tan religiosa como Marjane (que, sin embargo, no cree en la opresión de la mujer o en el uso obligatorio del velo), sus compañeros europeos eran increíblemente diferentes.



Mejor libro no-ficción


La guerra no tiene rostro de mujer de Svetlana Alexiévich. También dudé mucho en esta categoría, porque este año leí increíbles cosas en no-ficción, pero el libro de Svetlana fue de lo mejor. Tuve dudas entre este y Voces de Chérnobil, porque a los dos los considero al mismo nivel, pero finalmente ganó este, porque las historias de las mujeres que participaron como soldados en el Ejército rojo durante la segunda guerra mundial me llegaron al corazón. Como mujeres en una época en que la liberación femenina aún era una lucha constante, todas ellas fueron a encontrarse en un ámbito puramente masculino, donde tuvieron que convertirse en soldados. Casi un millón de mujeres fueron parte de las filas del ejército, y la mayoría fue por voluntad propia hasta el frente. Muchas de ellas incluso pedían estar en las primeras líneas de combate. 
Transcurrieron unos treinta años hasta que empezaron a rendirnos honores... A invitarnos a dar ponencias... Al principio nos escondíamos, ni siquiera enseñábamos nuestras condecoraciones. Los hombres se las ponían, las mujeres no. Los hombres eran los vencedores, los héroes; los novios habían hecho la guerra, pero a nosotros nos miraban con otros ojos. De un modo muy diferente... Nos arrebataron la Victoria, ¿sabes?
Francotiradoras rusas

Mejor antología


El aliento del cielo de Carson McCullers. Uno de mis mejores descubrimientos del año fue la magnífica Carson McCullers, gracias a mi sis, que estaba estudiando literatura norteamericana y me recomendó este libro. El aliento del cielo es un libro que sólo existe en español y es un compilado de casi todas las obras de Carson McCullers. La edición es preciosa y no dudo que voy a hacerme con un ejemplar en la próxima feria del libro, porque este libro lo leí en digital. Los cuentos de McCullers además son de temas tan variados y con personajes tan diferentes que ninguno te dejará el mismo sabor de boca. Mi favorito es Wunderkind, y de sus novelas cortas, mi favorita es Frankie y la boda, sobre todo por el personaje de Frankie y su manera de ver las cosas. Me hubiera gustado leer ese cuento cuando tenía la edad de Frankie y sentía que no me entendía ni Dios porque me hubiera sentido muy comprendida. Así que este es el ganador en esta categoría, un libro super recomendado con todo y que es un tocho de respeto.

Por cierto, que voy a hacer una campaña para que Seix Barral lo traiga a México, porque aquí sólo pude encontrar un eBook por $229, lo que, para un eBook (y el trabajo que se llevan, sé maquetarlos) me parece todo un asalto a mano armada. Me lo piratee porque tenía que leerlo, pero en cuanto vea una copia en físico del libro voy a correr a comprarla como maniaca. Es un libro que lo vale.

Mejor libro infantil


Dido para Eneas de María García Esperón. Otra categoría debutante y en esa casi no tuve dudas. Esta pequeña novela para niños, editada por el Naranjo, cuenta la historia de la Reina Dido, que salió de Fenicia para fundar Cártago en costas africanas y se encontró con Eneas, de quien se enamoró perdidamente y a quien, sin embargo, los dioses le habían trazado otro camino. Es un libro con ilustraciones preciosas de Omar Urbano, que complementan un texto increíblemente visual, algo muy complicado; sin embargo, creo que el mayor reto de este libro fue contar una historia de un amor tan trágico como el que nace entre Dido y Eneas y hacerlo para niños. Demuestra que, al escribir libros para niños, se puede escribir de temas más complicados. No debemos tratar a los niños como personas menos inteligentes, pues, a menudo, son ellos capaces de notar o de darse cuenta de cosas que nosotros no. Por eso, el mejor libro infantil del año se lo lleva esta preciosidad, de poco más de noventa páginas que debería no ser sólo leído por niños, sino por todo el mundo.

Mejor personaje secundario femenino


Awful Grandmother, Soledad Reyes, de Caramelo, Sandra Cisneros. Dios mío, esta abuela me recuerda a lo que... mi abuela la que no es mi abuela realmente dice de mi abuela la que si era mi abuela pero se murió quince años antes de que yo naciera (nada complicado, chavos). Una señora orgullosamente mexicana, pero mexicana blanca, no india, racista con los indios de piel color caramelo, pero orgullosa de sus raíces en Santa María del Río, la tierra de los rebozos de bolita. Una mujer enamorada, que vivió la revolución y se casó enamorada, que se enamoró de sus hijos para ignorar las infidelidades de su marido y se ganó a pulso el sobrenombre que, a sus seis años, le dio su nieta Lala, Celaya de Awful Grandmother. Así cómo lo pongo, no resulta el personaje más atractivo del mundo, pero creánme, lo es. Es una mujer que hace reír con sus comentarios fuera de lugar a todas horas y en todas partes (definitivamente no lo que querrías de suegra), que da ternura porque siempre hace mole en el cumpleaños de su hijo, que es capaz de amar y de odiar con una pasión que no se ve ni en las telenovelas mexicanas. Es un personaje magnífico y todo el mundo debería leer Caramelo. 

Mejor personaje secundario masculino



El señor Omochi de Estupor y Temblores, Amélie Nothomb. Este tampoco es un personaje agradable, sino que es el encargado de hacerle a Amélie la vida imposible. Poco afecto de las mujeres y en especial de las mujeres occidentales, es un japonés en toda la extensión de la palabra y está convencido que la manera de trabajar de su empresa está bien (por favor, que alguien le diga a Japón que si tienes la tasa de suicidios más alta del mundo, no vas bien). El señor Omochi considera que Amélie es su cafetera personal, una persona capaz de escribir cartas sin ninguna información más que el destinatario (¿el motivo de la carta? que lo adivine ella) y de sacar más de mil fotocopias de un reglamento del club de golf sólo por hacer algo. Es un personaje divertido, aunque sólo lo vemos así por el peculiar sentido del humor de Amélie, que se niega a ser rencorosa con sus jefes y más bien trata de entender sus excentricidades o simplemente soportarlas

Mejor libro


Pedro Páramo de Juan Rulfo. Dudé muchísimo, no sabía que libro poner. Me tentaba poner Johnny got his gun, repetir Las uvas de la ira, decir #yolo y poner a Amélie Nothomb con su Higiene del asesino, pero creo que, finalmente, este libro fue el correcto. Pedro Páramo, de Juan Rulfo. Es un libro que yo pondría en todas las listas de libros qué se deben leer antes de morir y si de mi dependiera, todo mexicano (y todo el mundo) lo leería al menos una vez en su vida. Probablemente crean que estoy exagerando, pero yo juro que no lo estoy haciendo, es un libro que se merece todos esos honores; Cómala se los merece. La historia se los merece. Juan Rulfo también. Es el mejor libro que leí en todo el año y apenas me duró un día, hasta me supo a poco porque, una vez que lo empecé, no pude ya soltarlo. Super recomendado. No dejen de leerlo bajo ningún motivo.


miércoles, 6 de enero de 2016

Razzies Literarios (II)

¡Ya están aquí! Los premios a las peores lecturas del año, aquellas que odie más, que me hicieron desear tener un rifle a la mano o de esos libros que tuve ganas de quemar todos los ejemplares. Todos esos títulos que, por merecer algo, no se merecen ni existir. Obviamente, después de esta entrada sigue algo mucho mejor, los premios a lo mejor del año, así que si hacen mucha bilis por aquí, recuerden que pueden esperar la entrada que sigue para ponerse de buenas. ¿Empezamos? No hay orden, el de arriba no es el menos peor y el de abajo el más... simplemente todos son... malos.


Ender en el exilio, Orson Scott Card


Una sola linea en todo este libro que no sea relleno es imposible de conseguir. De hecho, todo el libro ocurre entre el penúltimo capítulo de El juego de Ender y el último. Y narra hechos que ya ocurrieron allí, pero más extendidos. Todo es relleno, la trama carece de interés... porque... bueno, el libro carece de núcleo. Sólo se trata de Ender y Valentine haciendo cosas y yendo por allí, teniendo problemas estúpidos, con narración plana, personajes lamentables, cero interés y un exceso de fan service (no, eso no es buena literatura, no). Alguien dígale a Scott Card que, primero, se deje de mamadas y escriba buenos libros (cosa que no ha hecho en mucho tiempo) y dos, que mientras más escribe, más le noto la ideología de mierda que tiene. Hacía bien cuando la escondía. En fin, a la hoguera, para más rápido.


La reina roja, Victoria Aveyard


Imagina que metes Divergente (mal libro), Los juegos del hambre (libro decente, saga penosa), La selección (no lo he leído, pero la sinopsis es bastante reveladora) y cuanta distopía juvenil se te ocurra (puntos extras si es mala) en la licuadora y escribes un libro. El resultado es este despropósito. Personajes planos, que cambian de personalidad a cada segundo porque están al servicio de la trama, una trama poco interesante, errores de redacción (sobre todo en las comas) cada dos páginas (o menos), una redacción penosa, pedante a ratos y en general, plana cual sabana africana o peor. No, en serio, no es un buen libro y sólo da la casualidad de que tiene una portada preciosa. Cuanto daño ha hecho el marketing, por Dios. Todo lo demás lo pueden ver en la reseña que ya le escribí. Segundo libro a la hoguera, para acabar pronto.


Todas las hadas del reino, Laura Gallego García


De estar en entradas de Oscars Literarios, Laura aterrizó en mis Razzies. ¡Eso es caer bajo, Laura! ¡Muy bajo! En fin, ¿recuerdan a Nandito, a la lisiada y a Soraya? Agarren esa telenovela y júntenla con todos los cuentos de los hermanos Grimm que conozcan y va a salir este asunto. Una novela que es un plagio a Maleficent (y a la novela de la lisiada), con personajes planos, una trama demasiado enrevvesada, un final simple y sencillamente decepcionante, además de una redacción que me parto de risa. Laura, pero a ti no te enseñaron a usar los puntos suspensivos. En fin, una decepción total. Siendo un libro de Laura me esperaba algo mucho, pero mucho, pero muchísimo mejor. ¿Dónde quedó Finis Mundi? ¿El coleccionista de relojes extraordinarios? ¿Dónde dejaste las buenas ideas, Laura? Para más referencias, ver la reseña sin spoilers y con spoilers.



El teorema Katherine, John Green


John Green... John Green... ¿Qué haré contigo? Me caes bien pero escribes mal, decir de la chingada es decir poco. Este libro en sí tiene una trama insustancial, personajes calcados a los de sus otros libros, una increíble falta de naturalidad en todos los diálogos y notas en el pie de página que, e un intento de parecer graciosas rozan la pedantería más desesperante. Terrible en todo sentido. Como resultado, este libro es terriblemente aburrido, ni siquiera cuando ya lo estaba leyendo en una manera más irónica, buscándole los errores porque si no me iba a tirar de un quinto piso conseguí disfrutar del todo. Los personajes no invitan a que te preocupes por ellos y lo de John Green saludándote a cada página es increíble, pero inreíblemente malo. En fin. terrible. A la hoguera y si quieren saber más de él, reseña



Fangirl, Rainbow Rowell


Y ahora sí, ¡la última y nos vamos! El honor de ser el último libro de la entrada le corresponde a Rainbow Rowell, con este libro que todo el mundo adoraba. A ver, no es que sea el peor libro del mundo y reconozco que, por ejemplo, este libro esta mejor escrito que los tres de arriba, sólo en cuanto a su prosa, pero en cuanto a todo los demás... Los personajes son planos, mal desarrollados, Rainbow nos informa de sus cualidades, pero en realidad nunca nos las muestra. El libro es un monstruo del marketing, presentándonos al cliché más burdo de la chica fangirl que ronda por internet (y que yo no soy), que escribe de unos personajes increíblemente parecidos a Draco y a Harry, hechos obviamente para gustar justo en cuanto lees la primera línea sobre ellos. La verdad, yo paso. Lo de leer clichés no es lo mío. La reseña por aquí.

  

lunes, 4 de enero de 2016

Leamos a los premios Nobel | Reto de lectura

Como no encontré este reto como yo lo quería, con los lineamientos que yo lo quería, decidí que, si no estaba hecho, lo iba a hacer yo. Creo que ya ha quedado claro de que se trata, de leer a los premios nobel de literatura, no tiene mucha ciencia, así que explicaré de que se trata, por si alguien quiere hacerlo: 


  1. Tienen que leer al menos un libro de cada Premio Nobel de Literatura.
  2. Este es un reto atemporal. No hay fecha de inicio, y no hay fecha de fin. Da exactamente igual si lo hacen en un año, que si lo hacen en tres, en cinco o se tardan toda su vida (yo llevo dos intentando leerlos y no llevo mucho). El propósito es leer, no ir a velocidad
  3. Es retroactivo. Todos los libros que han leído en su vida cuentan. Por ejemplo, si ya leyeron un libro de García Márquez, lo pueden contar como parte del reto. Aunque si quieren empezar de cero, son más que bienvenidos.
  4. Es acumulativo. Cada año se anuncia un premio Nobel de Literatura, cada año se agrega un libro más. Al menos, hasta el momento en que deseen seguir el reto. Si un día deciden detenerse, son libres de hacerlo.
  5. No es obligatorio reseñar sus lecturas. Aunque mejor si pueden hacerlo.  
  6. ¡Disfruten la lectura!
Si desean anotarse, pueden notificármelo en esta entrada. Si tienen y van a publicar reseñas, pueden dejar el enlace de su blog, su cuenta de Goodreads, su canal de Youtube, o el medio que les apetezca. Si no, pueden dejar sólo su nombre. Yo voy a ir dejando mis avances en esta misma entrada, junto con los enlaces a las reseñas.

Participantes



Lista de premios Nobel


En color verde y negritas, los que ya leí, con el título de la obra que leer. En caso de existir, link a la reseña.


2017 - Kazuo Ishiguro - Nunca me abandones - Reseña
2016 - Bob Dylan
2015 - Svetlana Alexiévich - Voces de Chérnobil - Reseña
2014 - Patrick Modiano - Más allá del olvido - Reseña
2013 - Alice Munro - Mi vida querida 

2012 - Mo Yan
2011 - Tomas Tranströmer
2010 - Mario Vargas Llosa
2009 - Herta Müller - Todo lo que tengo lo llevo conmigo
2008 - Jean-Marie Gustave Le Clézio
2007 - Doris Lessing
2006 - Orhan Pamuk
2005 - Harold Pinter
2004 - Elfriede Jelinek
2003 - J. M. Coetzee
2002 - Imre Kertész
2001 - V. S. Naipaul
2000 - Gao Xingjian
1999 - Günter Grass
1998 - José Saramago
1997 - Dario Fo
1996 - Wislawa Szymborska
1995 - Seamus Heaney
1994 - Kenzaburo Oe
1993 - Toni Morrison - Sula
1992 - Derek Walcott
1991 - Nadine Gordimer
1990 - Octavio Paz - La llama doble
1989 - Camilo José Cela
1988 - Naguib Mahfouz
1987 - Joseph Brodsky
1986 - Wole Soyinka
1985 - Claude Simon
1984 - Jaroslav Seifert
1983 - William Golding - El señor de las moscas - Reseña
1982 - Gabriel García Márquez - Cien años de soledad
1981 - Elias Canetti
1980 - Czeslaw Milosz
1979 - Odysseus Elytis
1978 - Isaac Bashevis Singer
1977 - Vicente Aleixandre
1976 - Saul Bellow
1975 - Eugenio Montale
1974 - Eyvind Johnson, Harry Martinson
1973 - Patrick White
1972 - Heinrich Böll
1971 - Pablo Neruda - Veinte poemas de amor y una canción desesperada
1970 - Alexandr Solzhenitsyn
1969 - Samuel Beckett
1968 - Yasunari Kawabata
1967 - Miguel Angel Asturias
1966 - Shmuel Agnon, Nelly Sachs
1965 - Mikhail Sholokhov
1964 - Jean-Paul Sartre
1963 - Giorgos Seferis
1962 - John Steinbeck - Las uvas de la ira - Reseña
1961 - Ivo Andric
1960 - Saint-John Perse
1959 - Salvatore Quasimodo
1958 - Boris Pasternak
1957 - Albert Camus - El extranjero
1956 - Juan Ramón Jiménez
1955 - Halldór Laxness
1954 - Ernest Hemingway - Las nieves del Kilimanjaro y otros cuentos
1953 - Winston Churchill
1952 - François Mauriac
1951 - Pär Lagerkvist
1950 - Bertrand Russell
1949 - William Faulkner - La escapada
1948 - T.S. Eliot
1947 - André Gide
1946 - Hermann Hesse
1945 - Gabriela Mistral
1944 - Johannes V. Jensen
1939 - Frans Eemil Sillanpää
1938 - Pearl Buck - Viento del este, viento del oeste. 
1937 - Roger Martin du Gard
1936 - Eugene O'Neill
1934 - Luigi Pirandello
1933 - Ivan Bunin
1932 - John Galsworthy
1931 - Erik Axel Karlfeldt
1930 - Sinclair Lewis
1929 - Thomas Mann
1928 - Sigrid Undset - Catalina de Siena. 
1927 - Henri Bergson
1926 - Grazia Deledda - El secreto del hombre solitario. 
1925 - George Bernard Shaw
1924 - Wladyslaw Reymont
1923 - William Butler Yeats
1922 - Jacinto Benavente
1921 - Anatole France
1920 - Knut Hamsun
1919 - Carl Spitteler
1917 - Karl Gjellerup, Henrik Pontoppidan
1916 - Verner von Heidenstam
1915 - Romain Rolland
1913 - Rabindranath Tagore
1912 - Gerhart Hauptmann
1911 - Maurice Maeterlinck
1910 - Paul Heyse
1909 - Selma Lagerlöf - El carretero de la muerte. 
1908 - Rudolf Eucken
1907 - Rudyard Kipling
1906 - Giosuè Carducci
1905 - Henryk Sienkiewicz
1904 - Frédéric Mistral, José Echegaray
1903 - Bjørnstjerne Bjørnson
1902 - Theodor Mommsen
1901 - Sully Prudhomme