Divagaciones de una Poulain
by Nea Poulain
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domingo, 24 de julio de 2022

La compañía amable, Rocío Vega (o de historias que se contradicen a sí mismas)

Sinopsis: No hay nadie que no haya oído hablar de la Compañía Amable y sus hazañas, desde Salazim al reino de Aimar. De aventureras se convirtieron en leyendas, pero las canas no perdonan y el tiempo las ha separado. Y aunque los achaques y las viejas heridas aún duelan, aunque apenas se vean, aunque ni siquiera hayan sobrevivido todas, siempre serán un equipo. Por eso se lanzan al ataque sin dudar un momento. Por eso acuden a la llamada sin importar el peligro. Porque son amigas. Y por una amiga es distinto.

Fue una pésima experiencia, no lo voy a negar. Creo que quizá me debí de haber planteado qué buscaba antes de entrar al libro porque al haberlo agarrado con poca expectativa, simplemente porque era un libro de fantasía que se desmarcaba un poco de lo que hoy es el mainstream contemporáneo que han impuesto, sobre todo, los gringos, encontré poco y nada de lo que parecía ser desde su sinopsis. Veo el libro, con sus relatos y me cuesta saber por dónde empezar a reseñar. Creo que aplicaré la idea de hacer una lista porque no tengo un tema concreto (pero sí mucho incisos que como lectora me gustaría remarcar) salvo que La compañía amable es un texto que se contradice así mismo y hasta parece que narrativamente se miente a sí mismo constantemente y es, por lo menos, frustrante. Se le asoman las costuras todo el tiempo. 

En fin, allá vamos. 

Dos notas antes, no más: la reseña es para los lectores nada más y me baso en mi derecho en opinar lo que se me da la gana de cualquier libro publicado que leo. Dicho eso, vamos por partes, como dijo Jack, el destripador (aviso de que algunos spoilers hay):

Al-Andalus, Pablo Mendoza Peces

1. Hay una insistencia de parte de varias reseñas y del libro mismo en contarte que es una novela con una estructura particular. A mí me gustan las estructuras no lineales, pero creo que tenerlas claras ayuda a desarrollarlas. El poner el hilo conductor con flashbacks relacionados intercalados no es descubrir el hilo negro de las historias no lineales, tengo que decir (por ahí si lograra su cometido me gustaría porque me resulta interesante pero yo no lo llamaría innovador). El problema es que más bien que novela es una colección de cuentos que va dando tumbos por allí y por allá y referencia a los anteriores queriéndote convencer de su estructura de novela, pero no dejan de ser cuentos que no comparten más que personajes. Sólo el penúltimo hace un intento por unir el rompecabezas y no sé yo si ya para entonces era demasiado tarde. 

2. La descripciones no fueron lo mío. No puedo decir nada positivo ni negativo de ellas porque a mí no me gusta el tono medio grotesco que tienen, aunque reconozco que no es la primera vez que las leo del tipo en el pulp o en espada y brujería (género al que obvio hace alusión la historia, que es muy rolera de por sí). Así que ese punto lo dejaré descansar.

3. Los personajes no tienen voces distinguibles, especialmente en su versión más adulta. A algunas se las puede distinguir entre jóvenes y viejas (pero mientras son jóvenes todas tienen voces y tonos parecidos y si no hubiera acotaciones sería imposible distinguir de alguna manera quién habla) y a otras, como Trig, no. Otros personajes no le importan ni a la autora, como Ava, así que no veo porque me tengan que importar a mí.

Córdoba, Ananda C. Arán

4. Se agradece la diversidad pero también se siente como una lista taxidérmica en la que uno va tachando cosas: listo, ya hay una mujer trans, una persona en el espectro no binario, listo, mujeres sáficas, etc. Es más orgánica que en muchas cosas más mainstream porque está por todas partes, pero también es víctima de su propia trampa. Por ejemplo: a pesar de que nos encontramos en un mundo en donde se hace referencia a distintas ciudades con distingas costumbres y, sospecho, formas del habla, la única vez que se hace una diferencia es usando acentos y siento que es muy patronizing al respecto (las protagonistas, después de escuchar hablar al chico que hablan con acento se ponen a exotizarlo en plan "es que habla muy mono"). A mí directo me incomoda que cualquier persona, sobre todo del primer mundo o en un estrato social por arriba del mío llegue y me diga "ay, que mono acento". Siento que ese tipo de detalles le hacen poco favor al libro, porque usualmente los personajes se enfrentan a las ideas preconcebidas que cargan... siempre y cuando la pluma de la autora las note y acabas en esta sensación de volver a estrellarse con una realidad cuyas reglas se desdibujan. (Como nota, que al final el acento sea sólo un recurso burdo para que las protagonistas brillen es... extraño). 

5. Hablando de diversidad aún más: está muy bien no dejar pasar la transfobia, pero con la acefobia te voy a poner excusas, dijo el texto del libro. Hay una escena en la que un personaje, por desconocimiento y porque es muy bruta al hablar, le dice algo a una mujer trans aludiendo a que quizá necesita transicionar completamente para ser una "mujer de verdad". El libro luego habla de que la transición es un proceso delicado (similar al mundo real, aunque allá hablemos de magia) y que no necesita cambiar sus genitales de esa manera para ser una mujer de verdad. Es una de las primeras escenas de ese personaje y dejando de lado que a mí no me gusta que los personajes trans siempre tienen que ser un mecanismo en el que los autores (especialmente fuera de lo trans) dan lecciones de esa manera (haciéndolos reafirmar su género mediante consignas para que el texto nos diga "mira, quien escribió esto sí es woke") es medio tramposo (no hay esa clase de escena en The Order of the Pure Moon Reflected in Water: el protagonista es un hombre y ya está y explica su historia con las palabras y la terminología que conoce pero nunca te rompe la cuarta pared para decir: soy un hombre de verdad).

En fin, aprendemos algo, la personaja que dijo las cosas entiende que debe disculparse y ni dos escenas más adelante leemos como alguien dentro del mismo grupo la agrede porque es asexual a sus espaldas. Considerando cómo trata el texto las palabras hirientes pasadas, esperas que llegue el momento en el que también hable de eso, pero no. Lo único que conseguimos es una disculpa de mala gana y una excusa de mierda: "es que ya sabes cómo somos, así nos llevamos, somos pesadas". (Se puede ser pesado sin hacer gaslighting, pero no se lo contaron a las personajas de este libro). Hay una disonancia tremenda porque el subtexto te dice que son buenas personas con una desesperación terrible, pero luego pasan esas cosas (que son una oportunidad para mostrar errores y matices) y el subtexto, subido en su burro de que son muy buenas personas todo el tiempo, en todo momento y en todo lugar, se contradice a sí mismo, peca de lo mismo que condena a otros y te saca del mundo en el que te metió

Córdoba, Ananda C. Arán

6. Sobre el mismo punto: ser woke o consciente socialmente en el subtexto y que el texto refleje otras cosas o se contradiga es... común. El mundo en el que viven las protagonistas es un mundo donde hay esclavitud. No me voy a poner a disertar sobre si era o no necesario (yo creo que si no vas a tocar al tema directamente y tú estás inventando el mundo completamente, a la mejor no es neceseario, pero ahí lo valora cada quien) porque todos los textos están escritos como deben ser (aunque se contradigan), pero sí quiero resaltar un punto que me pareció molesto. La esclavitud se cuestiona sólo cuando le viene bien a las protagonistas, sólo cuando las toca directamente o las amenaza directamente. Esto no me parece de entrada mal porque es algo que pasa en el mundo, pero el texto lo vuelve directamente incómodo al llegar a la historia de Nadeeha, quien se reencuentra con su antigua amante (ambas de familias ricas, la segunda venida a menos) quien le dice que tuvieron que venderlo todo: los muebles, sus pertenencias, los esclavos..., menos a una porque ya estaba vieja y nadie la iba a querer. Así. Tan deshumanizante. Yo dije: uhm, quizá deberíamos volver sobre esto (porque el tema ya había aparecido dos veces antes en el libro), quizá la deshumanización no sea tan gratuita. No: lo era. Y el subtexto convenciéndote de que la que la había hecho era una pobre desgraciada que merecía ayuda y empatía y yo ya estaba en el punto de u can choke

En mi comentario en goodreads dije que toda España debería plantearse como toca este tema (hello, colonialismo, my old friend) y si tuviera que ajustarlo diría que todo el primer mundo debería hacerlo. Sobre todo cuando las instituciones monárquicas (países con monarquías, let me laugh) lloran por que la gente les dice oye igual y pedir disculpas no es tan difícil, eh. Al final, es una cultura que sale desde más arriba y llega hasta lo más abajo y ni cuenta nos damos a veces, pero las deshumanizaciones siguen allí y siguen siendo incómodas.

The Meditation Garden, Eddie Mendoza

7. La compañía amable quiere convencerte activamente de que sacrificar a un tu propio nieto por una amiga es un acto de sororidad. No tengo comentarios. El falso dilema moral que el libro te quiere asegurar que existe es despreciable (y en lo personal, odio al personaje de Dalika y no creo que tenga que perdonarse ella misma, creo que su hijo es el único que puede determinar si merece perdón de ningún tipo). 

8. Me parece productivo que el libro exista como ejemplo del uso del lenguaje inclusivo (en el caso del libro, se usa la e) en la literatura. Ya por lo demás que lástima que sea tan malo, pero desde un punto de vista lingüistico seguro es interesante. 

9. ¿Lo recomiendo? Así personalmente, creo que es claro que no. Pero cada lector tiene su viaje y sus análisis y si creen que como lectores les puede reportar algo, pues a leerlo. 

Nos vemos en la que sigue. Prometo cosas más positivas.

PD: A todas las reseñas de goodreads que decían que era imposible encontrar fantasía así en España, que no se veía fantasía épica, que los gringos y los ingleses todos, les sugiero asomarse a Olvidado Rey Gudú de Ana María Matute para reconocer que SÍ hay fantasía épica en España y que, aunque sea más invisible que en otras partes (las razones las explica Silvia Plató en Breve Historia de la Fantasía), sí existe. Esto como invitación a conocer el género que reseñamos, sobre todo si vamos a hablar de él tan categóricamente. Yo no podría, leo un libro y todavía me faltan cinco más.

lunes, 11 de mayo de 2020

Olor a menta, Myriam M. Lejardi | Reseña


Sinopsis: A Alexis le gusta ligar con cualquier persona que se esté quieta el tiempo suficiente, entrar en una habitación y que todos lo miren, los caramelos de menta y las chaquetas de cuero. Por eso, cuando muere y su egocéntrico ectoplasma queda ligado a Valeria, la única capaz de verlo y oírlo, se cabrea un montón. En una historia de últimas y primeras veces, descubre cómo dos caminos pueden cruzarse para siempre sin llegar a tocarse jamás.

Yo casi nunca reseño novedades, pero a veces, cuando lo hago, es porque las autoras son mis amigas. Jé. Hablemos Myriam, mi larga relación con ella y cómo pasamos de que yo leyera secretamente su fanfic a gritarle por Telegram. Les prometo que es una historia graciosa. Corte a Andrea a los quince años. Dieciséis, quizá diecisiete. Era tan edgy y tan emo por dentro que yo mi personalidad apenas me soportaba y leer un fanfic de una tal Metanfetamina, titulado Mortífago, de los adolescentes más edgys que había conocido jamás me llenaba el alma.

Mortífago es un recuento de la saga Harry Potter desde el punto de vista de los Slytherin. Draco Malfoy y sus amigos, más o menos. Lo narra un tal Theodore Nott que en la saga original aparece como tres veces, tiene un par de datos interesantes y nos presenta a un cast de personajes de los que a duras penas conocemos los nombres y unos cuantos rasgos de la personalidad. Cuando yo me puse a leerlo en serio, iba en el baile de navidad de cuarto año y la cosa era como Skins pero con magia. (Siempre fue como Skins pero con magia, sólo que después se le añadieron cosas turbias, sangre y muerte). En ese entonces la primera temporada Skins era mi vida porque siempre era reconfortante pensar en adolescentes que lo pasaban peor que tú (y ver que estaban guapos, para alegrar la vista). En fin, después de años de leer y comentar acabas buscando a los autores en tuiter y hablando con ellos (veo gente que se sorprende de eso, pero para mí es cualquier cosa, perdón lol) y te haces su amiga y comentas tus ideas y acabas extremadamente emocionada cuando publican su primer libro. Ese es el resumen más o menos de por qué leí Olor a menta tan rápido. La otra razón es que me gustan los fantasmas.


Como se trata el tema fantasmal en la literatura siempre me llama la atención. (No en vano reseñé El fantasma de la casa del lago de Ana Romero hace muy poco, que curiosamente trata temas parecidos, pero no tiene ni punto de comparación porque maneja todo de una manera diferente..., lo cual es lógico, considerando las diferencias culturales de sus autoras). Myriam presenta una propuesta interesante con Alexis y con Valeria. Alexis muere y se queda atado a ella, una bebe que sólo berrea y no habla. Sólo ella puede verlo (digamos, es su vínculo con el mundo), hablar con él y él, como buen adolescente inmaduro que acaba de morir, no está muy encantado con la perspectiva hasta que Valeria empieza a crecer.

¿Por dónde empezamos con la novela? Los personajes son divertidos. Valeria y Alexis son muy entretenidos de leer (genuinamente caen bien, especialmente ella), hay una hermana, un youtuber gamer que nunca usa pantalones y un gato llamado Miau Tse Tung (exijo que tenga un hermano llamado Cat Marx, aunque también aceptaría Stalingato/Leningato...; por favor no pongan detalles de comunistas en sus libros, esto es lo que pasa). Son dinámicos, bien perfilados..., o sea, son esa clase de personajes que no están planos como hoja de papel. Tienen sus motivaciones, su propósito en la historia..., todo. La premisa es relativamente sencilla (es de lo que yo llamo libros sandwich: lo que me leo entre una lectura pesada y otra; consideren que digo esto porque Engels me parece entretenidísimo y Lenin un paseo por la pradera), fantasma está atado a chica, chica le gusta fantasmas, fantasma le gusta chica, uy, no pueden tocarse.

¿Creían que no pondría una imagen de un gato comunista?

La novela es divertida, ligera, tranquila, no me sorprendió mucho porque conozco a Myriam. Me entretuvo, me hizo reír. Me hizo querer mucho a Valeria. Su rareza es encantadora (toda ella es encantadora). No es lo mejor que le he leído, pero consideren que he leído básicamente todo lo conseguible de Myriam y su versión de escritora en este libro es mucho más moderada, tranquila y con no tanto espacio para meter tanta movida (como dice ella). Pero si esto les pareció buenísimo (los estoy viendo en sus reseñas, en sus reviús de goodreads y en sus hilos-reacción de tuiter) pues lo único que tengo que hacer es señalarles el resto de su trabajo y decirles que en mi opinión es incluso mejor y maravilloso y todo es increíble. Porque Olor a Menta es bueno, eso sí. Podrá no ser mi obra favorita (pocas cosas van a superar mis ataques de risa leyendo Futuro Perfecto), pero de todos modos lo recomiendo con ganas.

Mi parte favorita de la novela es todo el rollo de que Alexis, como fantasma, olvide cosas. (No es novedad, ya pasa en Dos velas para el diablo y seguro en cuarenta libros más, pero).  ES TAN SATISFACTORIO VERLO COMO LECTOR. Es un detalle que en las historias de fantasmas me encanta: el que poco a poco pierdan su esencia (con plus points si además al principio o en alguna parte de la historia se les va el pedo y no entienden que son fantasmas). Y miren que si fuera por mí les contaría poco a poco el libro para explicarles por qué me gustó pero no es el punto. El punto es que lo lean.

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¿Y dónde lo voy a leer? Bueno, lo publica la editorial Grupo Amanecer. Si son de latinoamérica (o cualquier parte del mundo que no sea España), lo pueden comprar en digital (que sé que ustedes son la mayoría de mi público, veo los analytics, háganme señales de humo aunque sea) y si son de España, pues con la editorial lo consiguen en físico. Es una novela pequeñita, es perfecta como lectura ligera entre dos libros de esos que te machucan el cerebro (Marx, te estoy mirando a ti) y si les gusta el romance paranormal, pues es una buena apuesta por él (supongo, no es de mis géneros más atendidos últimamente). Myriam tiene una prosa muy divertida aquí incluso cuando te está contando cosas que probablemente te hagan llorar (no sé, soy una piedra, es complicado hacerme chillar).

No sé para que demográfico esté planeado este libro (lo siento, no me fijo en eso, me vale tres pitos generalmente), pero me pareció que puede encajar bastante bien en juvenil, cosas de adolescentes (estaba hablando con Myriam de que muchas veces la LIJ de Latam me parecía más escandolosa que dos adolescentes, uno de ellos fantasma, que querían coger y no podían..., pero es que bueno, tenemos Orfeo o Frecuencia Júpiter, por ejemplo, que son más crudos en otros aspectos, pero otro día les hablo de eso porque creo sinceramente que nuestro entorno permea mucho sobre nuestra industria editorial y yo estoy haciendo una reseña, no un ensayo). Pero si quieren el libro para adolescentes, pues de mi parte es un gran SÍ. Además aprovechen que por fin nos publicaron a Myriam, yo estoy así:


Y bueno, antes de que esto se haga eterno: les recomiendo leer a Myriam. Así, en general. No sólo esto, sino todo su trabajo. Que para algo gran parte está en fanfiction.net. Tiene propuestas interesantes, cosas padres, lágrimas, tragedia y, en el caso de este libro, dos personajes divertidos que probablemente les van a caer bien.

jueves, 16 de mayo de 2019

Watchmen y los comics serios™

 
Primera frase: Watchmen es una obra maestra.

Segunda frase: Su legado está lleno de mierda.

Tercera frase: No es su culpa, técnicamente.

Vamos a elaborar sobre esto, que esta entrada es a partes reseña y a partes rant y a partes crítica de muchas cosas. Vamos a empezar con el detonante que me hizo escribirla: un hilo de tuiter. Lo escribió @seth_bingo. La premisa del hilo es "cómo Watchmen arruinó los cómics" y debo decir que estoy de acuerdo en prácticamente todo. Especialmente con al idea de que ahora cada que intentan hacer un comic serio™, se entiende la seriedad como la violencia (for the sake of nothing), se cree que hacer a personajes extremadamente violentos los vuelve complejos (like, ese no era el único punto de Rorschach) y que una historia es oscura si contiene violencia sexual (because of yes). Bueno, yo les dejo el hilo:
Bueno, pero para hablar de todo lo que quiero hablar, primero tengo que hablar de Watchmen. Me extrañaría si no han oído hablar de Watchmen. La novela gráfica de Alan Moore e ilustrada por Dave Gibbons está listada como una de las mejores 100 novelas de todos los tiempos según Time. Ganó el Eisner Award por Best Limited Series, un Hugo y otro montón de premios... Hubo una película de Zack Synder y HBO va a sacar una serie (que creo que pretende llenar el vacío que va a dejar Game of Thrones). Igualmente es entendible si no han oído mucho de Watchmen, así que ese párrafo era sólo para ponerlos en contexto de lo grande que es esto. Pero bueno, ¿de qué se trata?

Sinopsis: In an alternate world where the mere presence of American superheroes changed history, the US won the Vietnam War, Nixon is still president, and the cold war is in full effect. WATCHMEN begins as a murder-mystery, but soon unfolds into a planet-altering conspiracy. As the resolution comes to a head, the unlikely group of reunited heroes - Rorschach, Nite Owl, Silk Spectre, Dr. Manhattan and Ozymandias - have to test the limits of their convictions and ask themselves where the true line is between good and evil.
In the mid-eighties, Alan Moore and Dave Gibbons created WATCHMEN, changing the course of comics' history and essentially remaking how popular culture perceived the genre. Popularly cited as the point where comics came of age, WATCHMEN's sophisticated take on superheroes has been universally acclaimed for its psychological depth and realism. 
(Es la única que pude encontrar entre mil ediciones en goodreads porque resulta que la mitad se dedican a alabar la novela gráfica y no a contar de qué es; si alguien quiere la traducción me dice). 

Bueno, Moore, entre otras cosas, intentó explorar cómo la existencia de los superhéroes afectaría el curso de los Estados Unidos (además de que los superhéroes son algo muy americano y durante la Segunda Guerra Mundial y la Guerra Fría muchos comucs fueron usados con fines patrióticos). Watchmen, entre otras cosas, responde a la pregunta de ¿cómo seria el mundo si existieran los superhéroes? Es un producto totalmente de su tiempo y contexto: entre sus páginas se encuentra la guerra de Vietnam y se puede sentir el ambiente que se vivía durante la Guerra Fría con la amenaza de una guerra nuclear. Obviamente, la historia asume que si los superhéroes hubieran existido, las cosas hubieran sido diferentes para Estados Unidos durante la guerra de Vietnam, por ejemplo (una pena, siempre me ha gustado la idea de que los commies le hayan pateado el trasero a USA). Bueno, todo ese contexto histórico es una de las cosas que hace grande a Watchmen (es un profucto y reflejo de su tiempo). 



Otro punto que hace muy grande a Watchmen son sus personajes. Como personas, los odio a todos. No se salva ni medio. Todos son complicados, tienen brújulas morales muy extrañas y no son, por supuesto, la imagen de un superhéroe que existe en el imaginario popular. Vamos, no son lawful good. El hecho de presentarlos así también hace que Watchmen se meta en el asunto de explorar cómo los héroes no son perfectos moralmente y que, en muchos casos, no son más que humanos intentando hacer lo que creen que está bien (y que puede no ser lo que el resto del mundo considere). De hecho, una de las cosas que me gusta más de Watchmen es un flashback en el que la gente de queja de la existencia de los vigilantes y Nite Owl le pregunta al Comedian de qué exactamente están protegiendo a la gente cuando están disolviendo la manifestación. Me encanta eso, todo el Who Whatch The Watchmen? y me encanta ver cómo se vuelven un instrumento represivo más en el mundo imperialista. (Como dice uno de los fragmentos que vienen al final de cada capítulo: God exists and is American). 


En fin, a nivel de historia, esas son algunas de las cosas que hacen a Watchmen increíble. Además, yéndonos hacia al lado más técnico de los cómics, la manera en la que está contada la historia, la manera en la que se usan los paneles y las ilustraciones de Dave Gibbons, es todo hermoso. Pareciera que no tengo ninguna queja, ¿verdad? Pareciera. Pero sí tengo. Soy una killjoy. Me gusta romper lo popular. Y les juro que casi no pude hacerlo con Watchmen. Hasta que, claro, vi todo el asunto de Sally Sparrow y The Comedian después de las 12 grapas completo. Y me acuerdo que pensé: ¿y esto para qué? No pude contestarme.

Hay un intento de violación en Watchmen. Odio la violencia sexual en la narrativa porque es norma común que se use por shock value, para desarrollar a personajes masculinos que o son los victimarios o testigos (olvidándose por completo de la víctima que casi siempre es mujer) o como manera de desarrollar a un personaje femenino porque le tiene que pasar algo horrible y lo único que se le ocurre a los escritores es ¡violencia sexual! No sé por qué Alan Moore decidió que era buena idea poner algo así en Watchmen, pero le tengo que reconocer que queda con el tono, aunque en mi opinión simplemente es un asunto que casi acaba dando igual al final y, en el momento en el que tien relevancia, podría haber sido cualquier otra cosa. CUALQUIERA. Pero bueno, Watchmen la salva con una buena narrativa, una buena historia, muchos dilemas morales y personajes femeninos interesantes (aunque yo siempre sentí que en todo el asunto había un poco síndrome de pitufina).


¿Qué pasa con su legado? Después de un intento de reseña/crítica a Watchmen, de eso vengo a hablar hoy: de lo que muchos escritores que intentan imitar los mismos dilemas de Watchmen entienden por una historia oscura, adulta o seria™. Casi todos se saltan la parte de los dilemas morales y aterrizan en la ultraviolencia y la violencia sexual gratuita sólo para demostrar que la historia es oscura, que el protagonista también es un hijo de la chingada o que están escribiendo para adultos. Lo que consiguen es una historia aburrida, incómoda por encima de todo y muchas veces, sin sustancia. (O sea, maigos, si van a imitar a Watchmen, mínimo léanla bien).

Yo me centro mucho en la violencia sexual porque siempre me pregunto POR QUÉ. Si lo escribes, ¿por qué? Si no sabes responder, no lo hagas. Si me dices que es porque quieres darle un lado oscuro a tu protagonista, no sólo le diste un lado oscuro, me hiciste desear darle con una silla en la cara repetidas veces (y si ese era el propósito, I guess, bien hecho; si crees que tu protagonista sigue un héroe, replanteate la vida entera). Si me dices que es porque quieres que la víctima pase por un evento traumático porque es necesario para su desarrollo, pregúntate si es sólo violencia sexual si es mujer y que harías si fuera un hombre. Si me dices que es porque el shock value, no lo hagas, shock value is not good storytelling. Si me dices que qué importa, si es sólo ficción, voltea a ver el mundo en el que vivimos: la ficción, es, por fuerza, un reflejo de la sociedad en la que vivimos y en la sociedad en la que vivimos, la cultura de la violación está más viva que nunca, la sexualidad y el cuerpo de las mujeres es una mercancía. ¿Por qué querrías seguir el patrón? Si yo escribo eso en ficción, lo que quiero es hacer denuncia, no shock value a lo pendejo, el trauma no es un prop para tus personajes sólo para hacer una historia más oscura y más adulta. ¿Y saben cuál es el problema de los que intentan imitar a Watchmen? Que se quedaron con el shock value y nada de la historia.


En fin, ya me quedó está entrada muy larga, pero ese es el asunto. Sé que repito un chingo pero aquí queda más claro: a las mujeres no nos gusta leer de violaciones que sólo existen por puro shock value. ¿Quedo claro?

Y bueno, aquí quedó esta entrada sobre Watchmen, violencia sexual en los cómics y qué hace a Watchmen una historia maravillosa. Gracias por leerla si es que llegaron hasta acá.

miércoles, 31 de enero de 2018

#TravesíaFeminista: recomendaciones de escritoras de Europa Occidental

¿Tiene cinco minutos para hablar de Libros b4 Tipos? Es un colectivo feminista/club de lectura bien chido al que pertenezo y es 100% talento mexicano, no se deje engañar, nos puede encontrar en facebooktwitter, instagram goodreads. Resulta que este 2018 nos traemos entre manos un proyecto muy especial, que es darle la vuelta al mundo leyendo a las mujeres, ampliar nuestros horizontes, viajar un poquito y cada mes vamos a recorrer una diferente región del mundo (dividimos el mundo en once más México, como Alá y libros de geografía nos dieron a entender). Empezamos el año con una lectura que llevábamos varios meses ya posponiendo, La amiga estupenda de Elena Ferrante (la misteriosa escritora italiana), que es el comienzo de la tetralogía Dos amigas. Eso, por supuesto, fue lo que nos hizo decidir que Europa Occidental sería nuestra primera zona por recorrer durante todo el mes de enero. 


Hoy les traigo recomendaciones de 10 autoras de diferentes países de Europa Occidental por si quieren sumarlas a sus lecturas en el futuro próximo y animarse ustedes también a viajar un poco. Intenté varias entre países y géneros, todas las escritoras son escritoras que yo ya he leído con anterioridad (y los libros que recomiendo tienen mi sello de aprovado). Así que, ¿empezamos?

Amélie Nothomb



Esta escritora belga que nació en Japón y vivió en un montón de lugares (China, Estados Unidos, Laos, Birmania, y Bangladesh) debido al trabajo diplomático de su padre es muy reconocida, especialmente por sus libros autobiográficos y por tener un agudo sentido del humor. Es, además, miembro de la Real Academia de la lengua y de la literatura francesas de Bélgica. Su voz como voz europea es una voz extraña y creo que eso es porque Amélie no descubrió Europa hasta los 16 años, donde estudió filología romana en la Universidad Libre de Bruselas (donde tuvo probolemas para integrarse porque en ese tiempo el apellido Nothomb evocaba a una familia de la alta burguesía católica y la extrema derecha... espero que hoy esté asociado más a ella que a esas cosas terribles). Amelie Notomb no falla en publicar un libro al año (y en español es publicada por Anagrama), así que aquí les dejo mis recomendaciones. (Reseñas de Higiene del asesino y La nostalgia feliz).


Cornelia Funke



Cornelia Funke es una de las voces más reconocidas dentro de la literatura juvenil de fantasía en lengua alemana, no necesita más credenciales. La escritora estudió pedagogía e ilustración (lo cual se puede notar porque ella misma ilustra sus propios libros con sus dibujos) y, además de dedicarse a ilustrar y escribir, ha sido trabajadora social en alemania para niños desfavorecidos. En español pueden encontrar sus libros con Siruela... o si tienen suerte y no viven en España, con el Fondo de Cultura Económica (en serio, lo mejor que hizo el FCE en su vida fue hacerse con los derechos de publicación de Cornelia Funke, porque sus ediciones son hermosas). Aquí, por supuesto, les dejo mis recomendaciones. (Reseña de Corazón de tinta).


Antonia Michaelis



Otra fantástica escritora de libros juveniles proveniente de Alemania (creo que, en cuestión de literatura infantil y juvenil, Alemania le ha hecho un gran servicio al mundo). Antonia nació en Kiel y estudió medicina Universidad Ernst Moritz Arndt en Greifswald. Ha realizado viajes a un montón de partes del mundo, pero lo que a mí me llama la atención es que ha estado dos veces en la India por largas temporadas (¡yo viví en India!). En español ha sido publicada por el Fondo de Cultura Económica en la colección juvenil A través del espejo y no es por nada, pero es creo que de lo mejor con lo que cuenta esa colección. Aquí les dejo mis dos recomendaciones. (Reseña de El cuentacuentos, reseña de Nashville).


Silvia Avallone 



Silvia Avallone es una escritora italiana muy poco conocida y que apenas publicó su primera novela en 2010, que le valió el premio Campiello Opera Prima. Silvia nació en 1984 en Biella y estudió filosofía y letras en Bolonia. Antes de publicar novela, publicó en 2007 un libro de poesía que no está traducido. Su primera novela, De Acero, habla de las clases bajas de italia y sigue la relación de dos mujeres adolescentes que viven en distintos contextos. Yo la leí hace ya varios años, pero no dejo de recomendarla. 

Carla Maia de Almeida



Esta escritora portuguesa es muy poco conocido en lengua hispana aún, debido a que sólo existe un libro suyo editado en español por el Naranjo, Hermano lobo. Carla Maia de Almeida es una periodista freelance además de escritora y también se dedica a la traducción. Estudió comunicación social en la universidad de Lisboa y también estudió un posgrado sobre el libro infantil en la universidad Católica Portuguesa. Les dejo mi únicar recomendación y sepan que su prosa es realmente especial. (Reseña de Hermano Lobo).


Herta Müller



No podía dejar de hablar de esta escritora que ganó el premio Nobel de literatura hace unos años. Herta Müller es rumano-alemana, su padre fue nazi (en el sentido de cuando los alemanes tenían dos opciones: ser miembros del partido o ver su vida arruinada) y su madre fue deportada para trabajar en campos de trabajos en Rusia realizando trabajos de reparación (algo muy común entre las familias de origen alemán que estaban en Rumania); como quien dice, esta escritora tenía una larga sombra sobre ella. Sus obras hablan sobre la guerra, sobre la posguerra y sobre la dictadura en Rumania (de donde emigró a Alemania Occidental después de negarse a colaborar con el gobierno). (Reseña de Todo lo que tengo lo llevo conmigo).


Simone de Beauvoir



Esta escritora francesa es muy conocida y quizá ya no necesita carta de presentación. De todas maneras, les voy a hablar brevemente de ella. Simone de Beauvoir fue una ensayista y filósofa francesa enmarcada en el existencialismo y escribió una de las obras cumbres del feminismo, El segundo sexo. Escribió numerosos libros a lo largo de su vida, y de hecho, un premio tiene su nombre en su honor, el Premio Simone de Beauvoir por la Libertad de las Mujeres. Simone de Beauvoir luchó por el derecho al aborto y fue clave para lograr el reconocimiento de los malos tratos sufridos por las mujeres durante la Guerra de Argelia. Sin más que decir, les dejo mi recomendación de ella.


Christine Nöstlinger



Esta escritora austriaca de 81 años (nació en 1936) que sigue más o menos activa es una de las escritoras más reconocidas de libros infantiles en la lengua alemana. Ha sido publicada en español por SM y otras editoriales de libros infantiles. Yo la descubrí de pequeña y sus libros me encantaban y además me hacían morir de risa. Sus libros están llenos de personajes excéntricos, divertidos, conflictos familiares y muy buenas amistades. Christine Nöstlinger estudió en la Academia de Bellas Artes de Viena, publica desde hace un montón de años y ha ganado dos veces el Premio Nacional de Literatura Infantil en Alemania y dos veces en Austria, además del Premio Hans Christian Andersen, que es considerado el Nobel de la literatura infantil.


Maite Carranza



Ahora les traigo una escritora española de libros infantiles y juveniles. Ya sé que repito mucho esa temática, pero es que es mi área (entre otras, leo un chingo de un montón de cosas). Maite Carranza es conocida por su trilogía La guerra de las brujas, pero además de eso ha publicado varios libros de fantasía juvenil. Además de novelista, Maite Carranza es guionista y profesora de guion; yo la quiero mucho por todos los matices que tienen sus personajes femeninos en sus novelas y el hecho de que sus mundos giren en torno a las mujeres y a todas sus cualidades. Les dejo aquí abajo mis recomendaciones. (Reseña de Palabras Envenenadas).

miércoles, 24 de febrero de 2016

2x1: Amélie Nothomb | Reseñas

Estoy intentando ponerme al corriente con las reseñas y fracasando, porque tengo muchísimas pendientes, pero bueno, por lo mientras, voy con una de mis escritoras predilectas. La única advertencia es que tengo estas reseñas tan atrasadas que son libros que leí el año pasado, pero que igual recomiendo. Por algún lado tengo que empezar a ponerme al corriente, ¿no?


La nostalgia feliz


Sinopsis: «Todo lo que amamos se convierte en una ficción. De las mías, la primera fue Japón.» Con esta estimulante frase Amélie Nothombabre La nostalgia feliz. Anuncia una nueva entrega de sus ficciones autobiográficas. En la novela la belga retoma el hilo de Ni de Eva ni de Adán, la narración de un idilio de juventud de su sosias literaria con Rinri. Dieciséis años más tarde, Nothomb acepta la invitación de una televisión francesa de regresar a su país natal. Allí no sólo se reencontrará con Rinri, sino también con su niñera, Nishio-san. El Japón de Nothomb son sus orígenes y un Shangri-La literario. Un país al que pertenece pero que le es extranjero: o sea, un oxímoron, como también parece serlo el título de la novela. El lugar en el que nació, y en el que se crió durante sus primeros cinco años, pero en el que, como hija del embajador belga, crecería inmersa y traspasada por una peculiar mixtura cultural. Y esto dota a su vital y melancólica prosa de una descacharrante lucidez. «Lo que has vivido», escribe Nothomb en el delicioso arranque de su nueva novela, «te deja una melodía en el interior del pecho: ésa es la melodía que, a través del relato, nos esforzamos en escuchar.» Gocemos con esta nueva partitura, pues sin duda suena muy bien.

Este libro marca la vuelta a Japón de Amélie. La verdad es que no lo recomiendo si no han leído antes Estupor y Temblores, que es la historia de sus peripecias trabajando en una empresa japonesa y Ni de Eva ni de Adán, que es su historia de amor muy particular. Este libro evoca continuamente a esos y es muy fácil que se pierdan si no los han leído. Además de que traba de la nostalgia que Amélie siente por japón y que yo encontraría imposible de entender si no hubiera leído primero los otros dos. Estupor y Temblores lo leí tan sólo unas semanas antes de este, pero mis aventuras con Ni de Eva ni de Adán ya son viejas, como de hace tres años y este libro, para mí, significó irme acordando poco a poco de todo lo que ya había leído.

Es un libro divertido, donde Amélie se encuentra con sus raíces y se sorprende de lo diferente que es el lugar donde nació y creció. Esa frase que abre el libro,  «Todo lo que amamos se convierte en una ficción. De las mías, la primera fue Japón», deja muy claro con lo que nos vamos a encontrar después: un intento de remembranza, a veces casi desesperado, todo un esfuerzo de Amélie para recordar cosas, como ese jardín de infancia que no le suena conocido pero en el que sabe que estudió. De las cosas que más me gustan de la escritora es, precisamente, que en su amor a Japón, no lo idealiza ni lo vuelve algo perfecto. Al contrario, lo critica. Critica sus amores, al mismo tiempo que nos deja ver el profundo amor que le tiene a Japón, sobre todo al Japón de sus recuerdos. 

Muy recomendado. De lo que me ha parecido mejor de esta autora son sus libros autobiográficos y este, por supuesto, no se queda atrás. 

Higiene del asesino


Sinopsis: Al anciano Prétextat Tach, premio Nobel de Literatura y acérrimo enemigo de las entrevistas, sólo le quedan dos meses de vida. Al hacerse pública la noticia de su próximo fallecimiento, en plena guerra del Golfo, periodistas de todo el mundo solicitan un encuentro con el novelista. Sólo cinco lograrán su propósito; los cuatro primeros serán víctimas de la arrogancia y capacidad destructiva de un genio decidido a vengarse del mundo despreciándoles y sometiéndoles a toda clase de humillaciones. La última entrevista, plagada de sorpresas, resolverá el enigma de tanta amargura con un violento y despiadado interrogatorio por parte de los dos duelistas dialécticos. El descubrimiento de un terrible secreto y un desenlace espeluznante, constituyen el colofón de esta historia sombría que se fundamenta en la magis­tral brillantez de los diálogos. Primera obra de Amélie Nothomb,Higiene del asesino dio a conocer el talento de su autora al manejar la crueldad, el cinismo y la ambigüedad para construir una atmósfera tan irrespi­rable como literaria.

Prétextat Tach es una persona, en todos sentido, horrible. De esas personas que nos escandalizamos en la vida real sólo por su existencia. Es un obeso mórbido cuyos hábitos alimenticios le causan arcadas a casi cualquiera, un escritor que está convencido que nadie lo ha leído de verdad, porque si lo hubieran hecho ya todos se hubieran suicidado, que se cree más inteligente que todo el mundo, pedante, que odia a los periodistas, a las mujeres (sus cuerpos, su existencia, todo) y que por alguna razón ha decidido dar cinco entrevistas antes de morir. Ya lo dije, es una persona horrible, asquerosa. Pero como personaje salido de la pluma de Amélie, es increíble, perfectamente formado.

El libro es un libro divertido, sí, pero necesitas armarte de paciencia. Tiene un humor bastante cínico y además, hasta antes de la quinta entrevista, la estructura es muy parecida. Las entrevistas empiezan parecido, con cada periodista convencido de que logrará lo que los anteriores no lograron, lo que nadie ha logrado y se cubrirá de gloria por ser capaz de entrevistar a semejante... engendro. No tengo otra palabra para describirlo. Pero todos, allí y allá, cometen errores: dejan ver sus vulnerabilidades, hacen preguntas que no deberían haber hecho, se escandalizan. Y Prétextat Tach aprovecha eso para humillarlos una y otra vez. 

Hasta la quinta entrevista. No les voy a desvelar más para no desvelar el libro, pero si diré que es un libro que, ante todo, se basa en los diálogos y en la rapidez para contestar que tiene el escritor, en su cinismo, su arrogancia y su odio hacia prácticamente todo lo que existe en el mundo. Incluidos sus lectores. Un libro pequeñito, recomendado, evidentemente